A la hora de buscar oportunidades en el mercado, las valoraciones no lo son todo. Bancos, telecos, y autos están baratas pero afrontan grandes riesgos. Sara Herrando, subdirectora de Análisis de Norbolsa, aconseja prudencia y una baja exposición a renta variable, en la que sí identifica oportunidades en los fabricantes de componentes para los coches, las energéticas y las que dan dividendos sostenibles y fiables.
En estos momentos de desaceleración del crecimiento global, ¿hay que buscar posiciones defensivas?
En estos momentos de volatilidad, como minorista me mantendría prudente, con una escasa exposición a bolsa. Pensamos que habrá un acuerdo comercial que revitalizará los crecimientos. Dentro de las grandes economías sí nos preocupa Alemania, por ser la más exterior de Europa. En España estamos tranquilos.
¿Y esa prudencia en qué exposición a bolsa se traduce?
Para el minorista yo recomiendo una exposición entre el 30 y el 40%. Hay que tener en cuenta que ahora la Fed ha adoptado una posición más acomodaticia, lo que supone un apoyo significativo para la renta variable, en la que estamos positivos pero con prudencia.
Estamos más en cíclicas porque las defensivas tienen ratios ya muy ajustados
Y dentro de ese 30-40% de exposición a bolsa, ¿hay que tener un sesgo más defensivo o cíclico?
Nosotros seguimos con un posicionamiento más cíclico que defensivo porque creemos que estas últimas presentan ratios ajustados. Recomendamos valores de energía, de petróleo y gas porque pensamos que es un sector que ha hecho su reestructuración, con altas rentabilidades por dividendo y valoraciones atractivas. También ocurre con la banca, pero ahí nos da más miedo por el tema político, el regulatorio y los tipos de interés tan bajos. En autos también vemos valoraciones más bajas, sin embargo, están amenazados por los aranceles de Trump, por eso estamos más posicionados en componentes que en fabricantes, por ponernos más defensivos dentro del sector. Otro sector infravalorado es el de las telecos, pero creemos que no hay un catalizador que permita que recuperen el valor que se merecen, además de los problemas regulatorios y la fuerte competencia.
En el sector de los componentes de automóviles, ¿cómo ve a las dos grandes representantes españolas?
Gestamp tiene la ventaja de no tener ningún riesgo en el tema del motor al dedicarse al chasis, y se puede ver beneficiada en el proceso de electrificación y coche autónomo ya que los fabricantes tendrán que externalizar el resto de los procesos. Y Cie nos da bastante tranquilidad por la gran diversificación de piezas que tiene. Las dos nos parecen firmas muy bien gestionadas que pueden enfrentarse a los retos del sector.
"Hace falta un regulador más benévolo para que no surjan amenazas como en el tema fiscal o el hipotecario"
Ha habido mucho ruido corporativo en las 'telecos' en los últimos meses... ¿esperan más movimientos?
El problema es la regulación. Pero lo ideal es que un sector con tanta competencia lleve a cabo una consolidación para ahorrar costes y contrarrestar la guerra de precios.
En el sector de los bancos, ¿también hace falta consolidación?
Lo que hace falta es un regulador más benévolo en el sentido de que no surjan amenazas como en el tema fiscal o el hipotecario. Tienen el reto de hacer negocio en una situación de tipos cero, con una regulación cambiante y una mala imagen.
"Es preferible elegir una compañía con un dividendo menos atractivo, pero que tenga más visibilidad"
¿Es preferible estar en los grandes y más internacionalizados o estar en los domésticos y más pequeños?
Preferimos los internacionales porque los domésticos soportan mucho riesgo regulatorio. Creo que en este momento los emergentes no tienen un entorno desfavorable, con estabilidad de tipos en EEUU y crecimientos en los principales países salvo Turquía.
Han aflorando importantes rentabilidades por dividendo tras las caídas, ¿qué pagos le gustan más?
Yo me fiaría de los dividendos en los que te crees el negocio. Es preferible elegir una compañía con un dividendo menos atractivo, pero que tenga más visibilidad. Las eléctricas presentan valoraciones elevadas pero también ofrecen dividendos sólidos. El sector de la energía también, porque han hecho una reestructuración y consigue generar más caja a precios del petróleo más bajos. Una teleco, por ejemplo, probablemente no te dé una alegría por cotización, pero sus dividendos son sostenibles.