
El tráfico aéreo está recuperado hasta niveles prepandemia, el resultado de IAG esperado para el 2024 será récord y la deuda de la aerolínea está más que controlada para los analistas. Y, sin embargo, la acción de IAG ha encontrado un freno en los 1,9 euros por acción que no supera desde agosto del año pasado. Ya ni hablar de los dos euros por título. Por contra, el consenso de mercado considera que la angloespañola tiene potencial para alcanzar los 2,5 euros por acción.
Las cuentas del pasado ejercicio batieron las expectativas del mercado y se espera que en este año el factor de carga (porcentaje de capacidad utilizada) e ingresos por asiento disponible sean superiores a los del 2023. De hecho, el consenso de mercado considera que en 2024 el load factor de IAG superará el 85% de media por primera vez desde 2010. Y el ingreso total por kilómetro y asiento disponible superará los 9,1 euros (también por encima de los datos del pasado ejercicio).
Existen diferencias entre las líneas del grupo, siendo Vueling la que ofrece mayores niveles de ocupación frente a Iberia o British Airways. Pero todas ellas contribuyen a mejorar el desempeño de IAG y a continuar con las mejoras de márgenes de beneficio.
El consenso de mercado que recoge FactSet prevé un beneficio operativo de 3.455 millones de euros con un margen ebit superior al 11%. "La fuerte demanda de ocio impulsa los precios más altos. Esto mejora la oportunidad también de reinversión de IAG en 2024 y expandirá los márgenes de beneficio operativo del grupo de manera sostenible hasta 2025", según el analista de JP Morgan, Harry J Gowers.
La seguridad de la cotizada angloespañola en su negocio es tal que ya cuenta con el 92% de los ingresos del primer trimestre del 2024 cubiertos (incluye la Semana Santa este año) y más del 60% para el periodo comprendido entre mayo y junio. Además, IAG se sitúa entre las aerolíneas europeas que mejor está protegida, históricamente, frente a la volatilidad del precio del combustible. Solo hasta marzo, las coberturas de petróleo del grupo superaban el 80% de sus gastos totales por combustible de ese periodo. Hay que tener en cuenta que el precio máximo registrado en lo que va de año supuso ver un barril Brent en los 87 dólares y el precio medio se sitúa en los 81 dólares. Como dato, en el 2023 el precio medio del Brent fue de 82,5 dólares y las previsiones para el año en curso plantean un Brent también en los 82,5 dólares de media.
La recuperación del transporte aéreo de pasajeros a niveles preCovid y los costes de combustible condicionan prácticamente por igual a las principales aerolíneas. Por eso, los expertos también se fijan en el peso de su deuda financiera neta y los años de beneficio de explotación que serían necesarios para pagar a sus acreedores. El ratio de deuda neta entre ebitda de IAG cerró diciembre por debajo de las 1,7 veces, una proporción que no despunta ni frente a su propia media ni frente a otras cotizadas del sector, tanto europeas como estadounidenses (American Airlines dobla el ratio de IAG).
Asimismo, el consenso de FactSet prevé que IAG baje su proporción de deuda entre beneficio hasta las 1,5 veces al cierre del 2024. "Si se excluyen los arrendamientos, IAG tendría una deuda financiera bruta moderada, de 2.688 millones de euros y los vencimientos a corto plazo son reducidos (63 millones en 2024 y 552 en 2025)", explican desde Bankinter.
De cara a su valoración actual, IAG cotiza con descuento frente a la media del sector. Con un PER (veces que el beneficio neto queda recogido en el precio de la acción) de 4,4 veces está más barata que Ryanair, con un PER superior a las 9 veces o las 4,6 de Lufthansa. Solo Air France-KLM cuenta con menor prima que la angloespañola. Además, el consenso de mercado que recoge FactSet estima que la acción de IAG cuenta con un margen de mejora superior al 30% hasta los 2,5 euros de precio objetivo.
Hay dos aspectos que podrían dar la oportunidad a IAG a romper la barrera de los 1,9 euros. Por un lado, está la adquisición de Air Europa que está en fase de estudio por parte de la Comisión Europea ante las dificultades en materia de competencia que plantea. "Bruselas expresa su preocupación a pesar de que IAG espera que el acuerdo se complete a finales del 2024. Pero si el acuerdo se bloquea, ¿planteará IAG otras alternativas?", se preguntan desde Bankinter.
Después está la recuperación del pago de dividendos, que desde IAG descartan con cargo al 2023. La prioridad de la compañía sigue siendo la de reducir deuda así como la inversión en mejorar su flota. No obstante, varias firmas de análisis contemplan el anuncio de un dividendo a lo largo del ejercicio en curso, más aún si finalmente no se puede adquirir Air Europa. El consenso de expertos habla de hasta 0,1 euros por acción con una rentabilidad por dividendo del 3,5%.