Al inversor británico Chris Hohn lo conocen muy bien muchas cotizadas de todo el planeta. La mayor empresa de ferrocarriles de Canadá (Canadian National Railway), las francesas Airbus y Safran, Alphabet (la matriz de Google), la agencia Moody's... la lista es larga. El millonario que está al mando del fondo The Children's Investment (TCI) está poniendo ahora patas arriba al consejo de Cellnex Telecom tras convertirse en su principal accionista y no es la primera vez que busca que se le escuche en una empresa de la bolsa española. Ya lo consiguió en Aena y Ferrovial. A día de hoy, de hecho, TCI es el único fondo con un activismo considerado "muy alto" entre los principales accionistas de las firmas del Ibex, según datos de FactSet, con una actividad mucho mayor a la de otras firmas como Schroders, M&G, Norges o BlackRock.
El fondo que capitanea Chris Hohn se dirigió la semana pasada a Cellnex en una carta en la que adelantaba su intención de llevar a la junta prevista para el próximo 3 de junio el cese de Bertrand Kan -el hasta entonces presidente-, Peter Shore y Alexandra Reich, y nombrar a Jonathan Amouyal (de TCI) así como a otros posibles directivos adicionales. De momento, ya ha conseguido que Kan sea sustituido por Anne Bouverot como presidenta no ejecutiva. Y ahora busca, según Bloomberg, sacarlo del consejo y que Marco Patuano, ex CEO de Telecom Italia y antiguo presidente del consejo de la propia Cellnex, tome el relevo de Tobías Martínez como CEO.
No sería la primera vez que consigue transformar la dirección de una compañía. El año pasado TCI logró un objetivo muy parecido en la mayor empresa de ferrocarriles de Canadá, Canadian National Railway, que capitaliza ahora más de 70.000 millones de euros en bolsa. TCI, con un 5% del capital de la compañía, defendió a capa y espada que la firma ferroviaria necesitaba una nueva administración para ser más eficiente y que su acción se recuperase en bolsa. Tras una disputa con la empresa, el fondo logró dos asientos en el consejo y la compañía nombró a Tracy Robinson como nueva presidenta y directora ejecutiva.
Pero las acciones de Hohn no siempre van dirigidas a un cambio profundo en los consejos de administración. El vehículo que fundó también ha intentado influir en la estrategia y en otras decisiones operativas de muchas compañías, además de buscar cambiar las políticas de sostenibilidad. Uno de los casos más recientes es su firme oposición, el pasado mes de febrero, a una operación anunciada por Airbus. Escribió a la empresa para "instarla a que termine de inmediato las negociaciones con Atos sobre la compra de un participación minoritaria en Evidian".
A finales del año pasado, TCI también lanzó una campaña activista solicitando a la matriz de Google, entre otras cosas, que redujera sus costes de plantilla al considerar que son elevados. Y volvía a insistir en enero, puntualizando que la dirección debería reducir la plantilla en un 20%.
Su 'huella' española en Aena y Ferrovial
Antes de su activismo en Cellnex, el fondo británico también ha presionado a sus dos otras grandes apuestas en infraestructuras en la bolsa española: Aena y Ferrovial.
En el gestor aeroportuario ha dejado una huella muy importante. En 2020, TCI solicitó a Aena que llevase a su junta de accionistas un punto para presentar un plan de acción climática en 2021 e informes actualizados posteriores. Y lo logró. Una propuesta que supuso un cambio profundo y que, además, fue respaldada en junta por los accionistas de la compañía.
El clima también fue un elemento de presión en Ferrovial hace unos años. En 2019, TCI instó a la compañía a "abogar por una mayor eficiencia en la gestión del tráfico aéreo para reducir las emisiones y divulgar los datos ATM y las emisiones asociadas. TCI también afirmó que Ferrovial debería adoptar una estación de carga eléctrica, entre otras cosas", según recoge FactSet.
Aunque su última palabra en Ferrovial ha sido a raíz de la decisión de la compañía de trasladar su sede social al Ámsterdam (Países Bajos), y en este caso sí ha apoyado públicamente a la empresa. Es más, después del anuncio reforzó su posición en el capital.
Qué fondos influyen más en España
El activismo que están realizando fondos como TCI no deja de crecer en el mundo, aunque en España la presión aún es menor. "En Europa, la actividad de los inversores activistas con intención de influir en la estrategia y en las decisiones de compañías cotizadas ha alcanzado un nuevo récord con 60 campañas iniciadas en 2022", expone Lazard en un informe, señalando que "España está menos representada en la distribución de los objetivos de los activistas en Europa, con un 5% de las campañas activistas en Europa", frente al 40% que supone Reino Unido. En países como Francia la actividad ha crecido un 50%.
Más allá de TCI no hay ningún fondo con peso relevante en las empresas del Ibex que realice un activismo "muy alto" en el mundo, aunque FactSet también califica así a Gabelli Funds (GAMCO), un fondo capitaneado por el inversor Mario Gabelli que está presente en BBVA, Acciona y en eléctricas españolas como Iberdrola, Endesa o Redeia pero con participaciones muy, muy residuales.
Sí que tienen peso en el Ibex otras ocho firmas de inversión que FactSet considera que ejercen un presión "alta". Se trata de Schroder IM (en el capital de Iberdrola, Naturgy, Repsol, Acciona Energía y Redeia); Harris Associates (en Amadeus y Fluidra); T. Rowe Price (en Amadeus); M&G IM (CaixaBank, Acciona Energía y Mapfre); Assenagon AM (CaixaBank); Artisan Partners (CaixaBank y Ferrovial); Capital International (IAG); y Millennium Manag (Grifols).
En cambio, en grandes accionistas de la bolsa española como Norges Bank, el plan de pensiones del Gobierno de Canadá, el fondo soberano de Qatar o el gigante BlackRock el grado de activismo se considera "medio".
