
El pulso que retomaban el martes las firmas financieras del Ibex 35 vuelve a desvanecerse. La sesión del miércoles culminó con caídas del 7,70% de media en las seis entidades bancarias del principal selectivo nacional, al contagiarse de la estrepitosa corrección de Credit Suisse, que se derrumbaba hasta un 24% en una sola sesión después de que el principal accionista de la entidad suiza, el Banco Nacional Saudí, haya descartado brindar más asistencia financiera a la entidad en dificultades.
El sector que ha liderado las alzas en lo que va de año, gracias a las diferentes subidas de los tipos de interés y lo que éstas revierten en su negocio, aglutina caídas de 15,7% de media desde el pasado viernes, que dejan a Bankinter, CaixaBank y Unicaja en pérdidas en el cómputo del año. Era el viernes pasado cuando empezaban a retumbar los temores sobre el sistema financiero a raíz de la quiebra de Silicon Valley Bank (SVB), que volvía a poner sobre la palestra el miedo a revivir una crisis financiera como la de Lehman Brothers.
El tsunami comenzó cuando el banco de California anunció una gran ampliación de capital para tratar de contener sus finanzas, tras reconocer que su propia cartera de activos había sufrido grandes pérdidas. Esto provocó una oleada de ventas de sus acciones que obligó a suspender su cotización el viernes y, finalmente, el Gobierno de California anunciaba a media sesión la liquidación del banco.
Ahora, sin haber podido recuperar todavía el aliento, la banca europea se ve nuevamente arrastrada por el pánico desatado tras la caída hasta mínimos históricos de Credit Suisse y las entidades bancarias españolas pierden gran parte del valor que habían acumulado en el total del año en curso en tan solo cuatro jornadas. Tal y como subrayaba en un informe S&P Global Ratings a principio del ejercicio, "los bancos españoles son más sensibles a la subida de tipos por cómo están diseñadas sus bases de depósitos respecto a otros países europeos". Y así ha podido verse en sus cotizaciones, con entidades como Banco Sabadell, Banco Santander y BBVA anotándose avances superiores al 30% en bolsa –y con algunos de ellos alcanzando máximos históricos– antes de la hecatombe que arrancó el viernes.
En el caso de Bankinter, la más damnificada en el cómputo del año, las pérdidas del 15,8% de las últimas cuatro sesiones la dejan con una caída anual del 9%. Concretamente, la firma presidida por Pedro Guerrero descendía al terreno negativo el pasado lunes, cuando su cotización bajaba hasta los 5,93 euros. La compañía ya era la última de la fila en cuanto a ganancias en bolsa antes de la profunda corrección de los últimos días.
CaixaBank, que estuvo luchando durante toda la jornada por aguantar en el verde, también pasaba a cierre de ayer la frontera anual del negativo. La compañía, que se anotaba una subida anual del 6,72% hasta el viernes, se queda con un -1,03% tras la caída del 10,6% de la jornada de ayer. Además, es la única entre las españolas que ve un recorte en su valoración en la última sesión. Este tijeterazo viene de parte de Bestinver, que rebajaba el precio objetivo de la firma de 4,5 euros a 3,41 en la revisión de ayer.
La última incorporada al club de las 35, Unicaja, que se marcó un espléndido debut en el índice y estuvo entre las más alcistas durante semanas, también sucumbía a lo largo de la jornada de ayer al rojo anual, con un descenso del 0,78%.
Un fuerte potencial
Excepto en el caso de CaixaBank, toda esta vorágine de acontecimientos no ha influido, de momento, en las valoraciones de la banca española, que no han experimentado cambios ni en el precio objetivo ni en las recomendaciones.
Así, tanto Banco Sabadell como Unicaja, Banco Santander y CaixaBank continúan ostentando un consejo de compra por parte del consenso. Bankinter y BBVA levantan un mantener.
En cuanto al potencial, el Ibex Banks, el índice que recoge las entidades bancarias españolas, cuenta con un recorrido medio del 32,9% de cara a los próximos meses. Unicaja y Banco Santander superan el 40%, segúndatos del consenso de FactSet, y Bankinter y Banco Sabadell presentan recorridos del 33%. CaixaBank es la última en este sentido, con un potencial del 24% tras las caídas, seguida de BBVA, con un 29,8%.
Así las cosas, pese a las turbulencias que se atisban en el horizonte por el miedo que se ha generado sobre la liquidez del sector tras la quiebra de SVB y los derrumbes de Silvergate y Credit Suisse, desde Renta 4 resaltan en su último informe la "posición cómoda", en cuanto a liquidez, con la que cuentan los bancos españoles.
Desde la entidad subrayan que, a cierre de 2022, "el ratio de liquidez LCR medio de las entidades cotizadas se situó en el 222%. Unos ratios que están muy por encima del nivel regulatorio del 100% y ello a pesar de la reducción producida en el último trimestre, como consecuencia de la devolución de la mayor parte de las TLTROs en diciembre 2022", finaliza.
Con todo, el posible rumbo que tome la industria bancaria está a la espera de la intervención oficial de Christine Lagarde, presidenta del BCE, que tendrá lugar hoy, y la ruta a seguir con el alza de tipos.
Relacionados
- Société Générale y BNP Paribas, los bancos europeos más castigados por el hundimiento de Credit Suisse
- El Banco de España pide a la banca su exposición al tocado Credit Suisse
- ¿Un Silicon Valley a la española? La banca tiene menos del 13% del activo invertido en renta fija
- Banca March se fija como objetivo un aumento del 40% en clientes de banca privada