Société Générale, BNP Paribas, ABN Amro e ING han sido, al margen de las entidades españolas, las principales víctimas colaterales del hundimiento en bolsa de Credit Suisse ante las dudas desatadas entre los inversores sobre la solvencia del banco suizo en otra jornada aciaga para la banca.
En una sesión en la que el Stoxx 600 Banks (el sectorial que aglutina a las principales entidades financieras de la bolsa del Viejo Continente) retrocedió un 7% en la que ya es su peor jornada desde febrero del año pasado y ningún valor se libró de los números rojos, las dos firmas francesas fueron las más bajistas con pérdidas del 12% y del 10%, respectivamente. Le siguieron los dos neerlandeses con retrocesos de más del 9%, Deutsche Bank, Barclays, Unicredit, Bawag y Erste, con descensos superiores al 8%.
Al otro lado de la tabla y, curiosamente, con pasaporte suizo, figuran los dos bancos que menos cayeron ayer: Banque Cantonel Vaudoise, el banco regional del cantón de Vaud, y Cembra Money Bank, con descensos del 1,7% y del 2,6%, respectivamente.
¿Alarma en la banca europea?
¿Qué pueden esperar los inversores del sector de cara a los próximos días? "La situación sobre el comportamiento de la banca podría extenderse esta semana, sobre todo hasta que Christine Lagarde se dirija a la prensa para presentar la decisión del BCE y responder a las preguntas de los medios de comunicación", señala Darío García, analista de XTB. Desde su punto de vista y a la espera de cualquier comunicado oficial de la entidad suiza, "en la eurozona se espera que las palabras de la presidenta del BCE ayuden a mitigar el castigo sobre los bancos europeos", añade.
Para Marco Troiano, responsable de calificación de instituciones financieras de Scope Ratings, las posibles quiebras de otros bancos en EEUU repercutirán en los mercados financieros y, "muy probablemente, llevarán a suavizar la dureza monetaria de los principales bancos europeos". En su opinión, las quiebras bancarias al otro lado del Atlántico y el riesgo de contagios "no alteran la perspectiva positiva que establecimos para los bancos europeos a principios de 2023". Con todo, añade, "el margen para resultados imprevistos en una situación volátil y cambiante exige cautela".