Bolsa, mercados y cotizaciones

Europa cierra la peor sesión del año por la preocupación ante la cepa sudafricana

  • La UE suspende los vuelos con los países más afectados por la nueva cepa
  • Las compañías más castigadas han sido las turísticas: IAG cede un 15%
  • El barril de Brent se desploma un 9% adelantando un posible recorte de la demanda
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A medida que los contagios de la nueva variante del coronavirus –identificada por primera vez en Sudáfrica– han ido en aumento, la preocupación en todo el globo ha ido de la mano. En Europa, y a las puertas de la Navidad, Austria ya ha anunciado su cuarto confinamiento para doblegar su curva de contagio mientras que otros países del Viejo Continente, como Alemania, tienen la incidencia disparada.

La incertidumbre es evidente. Para evitar que el panorama empeore, la Unión Europea ha aprobado este viernes "activar el freno de emergencia" para detener el tráfico aéreo de la eurozona con las regiones donde esta nueva cepa está desatada: Sudáfrica, Botsuana y Hong Kong.

Las reacciones no se han hecho de rogar. El anuncio ha provocado el pánico en los mercados que se han desplomado ante la posibilidad de volver a las restricciones de movilidad y la caída del consumo, producción y comercio internacional. Aunque se tratase de una caída puntual, este viernes ha sido la peor jornada para los mercados europeos en lo que va de 2021.

El Dax alemán cede un 4,15% el pasado viernes con lo que despide la semana en los 15.257 puntos, recortando un 5,59% en cinco días. La misma suerte ha corrido el resto de los principales índices como el EuroStoxx y el Cac francés, cediendo un 6,13% y un 5,24% desde el lunes, respectivamente. El índice europeo ha vivido su peor sesión desde marzo de 2020. Con las cifras de las últimas jornadas, la debilidad de las bolsas europeas dificulta la posibilidad de asistir a un rally de fin de año. Para el analista de Ecotrader, Joan Cabrero, la referencia se situaba en los 15.690/15.730 puntos del Dax alemán ya que, por debajo de esa cifra, apenas habrá posibilidades de cerrar el año con optimismo para los inversores.

El selectivo español, que ya estaba desmarcado y muy por detrás de la evolución del resto de las bolsas europeas en el año, ha vuelto a ser uno de los índices del Viejo Continente más castigados. Desde el lunes, el Ibex 35 ha cedido un 4% lastrado principalmente por las compañías enfocadas al turismo.

El rojo fue el protagonista de la última jornada con solo tres valores en verde. Al situarse al cierre de mercado en los 8.402,7 puntos, el selectivo ha perdido el soporte que Cabrero estableció como referencia al marcar "por donde discurría la directriz alcista que surge de unir los mínimos de las últimas correcciones bajistas". Por ello, el experto de Ecotrader señala que "al perder esa cota se puede pensar en una recaída en busca de apoyo a soportes como son los 8.550 puntos e incluso los 8.250".

Dentro del Ibex, IAG se llevó el peor golpe al encajar una caída del 15,59% durante la jornada del viernes. La compañía esperaba alcanzar en el cuarto trimestre el 60% del tráfico aéreo que registró en 2019, previo a las cancelaciones provocadas por el coronavirus. De nuevo, las compañías ligadas a la actividad turística han sufrido las mayores correcciones, como Meliá Hotels que se ha dejado un 7,7%; Aena, un 8,77%; o Amadeus, un 7,5%. Pero también hubo grandes ventas en la banca. El Santander ha perdido un 8,9% y BBVA ha recortado un 7,3%.

En busca de refugio

Aunque se hayan producido estas caídas repentinas, los analistas consultados consideraron que habrá que esperar a tener más detalles sobre la efectividad de la vacuna en esta nueva variante de coronavirus antes de hablar de un desplome de las bolsas a largo plazo.

Sin embargo, hay inversores que sí han acudido al mercado de deuda en busca de un refugio para su dinero, como refleja la caída del 25% en la rentabilidad del bono alemán, mientras que la prima de riesgo en España se situó en los 76 puntos. Otro ejemplo es la subida que ha experimentado el precio del oro con la onza por encima de los 1.800 euros.

La maniobra de Estados Unidos de liberar parte de su reserva de barriles de petróleo para controlar la inflación y su disputa con la OPEP, que no baraja un cambio en los niveles de bombeo de crudo, han quedado diluidas en las caídas en los futuros del pasado viernes. Menos desplazamientos por las restricciones de la pandemia implicarían una reducción de la demanda mundial de combustible. Con el anuncio de posibles restricciones de movimiento, como las confirmadas por ocho países europeos con Sudáfrica, los precios del crudo se resienten en torno a un 10%, con el barril de Brent en los 72 euros.

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