Tressis Cartera Eco30, el fondo asesorado por elEconomista, ha llegado a la mayoría de edad, esa que, en el caso de los fondos de inversión, se establece en los tres años de vida por permitir analizar el comportamiento de un producto en el medio plazo. En el caso de éste, la ha cumplido con una rentabilidad acumulada desde el 30 de septiembre de 2018, que fue el día en el que la Comisión Nacional del Mercado de Valores aprobó el primer fondo de inversión asesorado por un medio de comunicación en España, del 22,7%. Y lo ha logrado con dos crisis de mercado de por medio.
Por poner en contexto estas ganancias, se trata del fondo más rentable de bolsa internacional de estilo valor de gestoras españolas tan reconocidas como Bestinver, Cobas AM, Magallanes Value Investors o Gesconsult, entre otras, desde el inicio del fondo asesorado por elEconomista. Frente a su categoría, la de renta variable de gran capitalización estilo valor, que es donde lo engloba Morningstar, este vehículo se sitúa en el puesto número 10 de casi una treintena de productos, que ganan, de media, dos puntos menos de rentabilidad que Tressis Cartera Eco30. Cabe recordar que este vehículo selecciona 30 valores de calidad internacionales, en base a sus fundamentales, y establece diversificación sectorial -ningún sector puede tener más de cuatro representantes- y geográfica.
El camino no ha sido fácil
Estos resultados se han conseguido a pesar de transitar por un camino lleno de baches. El primero de ellos llegó poco después de que el fondo naciera, ya que 2018 pasará a la historia como uno de los años más difíciles de gestionar en mercado, hasta la llegada del Covid. Bastaron solo tres meses para borrar de un plumazo las ganancias conseguidas por los inversores en la primera parte del año, que no pudieron refugiarse en ningún tipo de activo porque todos, sin excepción, dejaron pérdidas. Ese fue el escenario en el que el fondo asesorado por elEconomista tuvo que construir su cartera y echar a andar.
No hubo un único responsable de aquel desplome: a las tensiones entre China y Estados Unidos, se unieron la debilidad de la tecnología americana, la escalada en la rentabilidad del bono americano, que llegó a superar la barrera del 3% o el Brexit.
Una vez pasado ese obstáculo, que se tradujo en una caída del 6,28% del valor liquidativo del fondo, Tressis Cartera Eco30 escaló un 20,30% al año siguiente, en 2019. Nada hacía presagiar entonces que, tras un buen año de mercado, este producto -y el mundo entero- se enfrentaría poco después a una crisis sanitaria y económica sin precedentes, como la que trajo consigo la pandemia del Covid, que volvió a hundir a los mercados.
Como consecuencia, el fondo cedió un 6,77% el año pasado. Pero aún así, el resultado de Tressis Cartera Eco30 fue superior al de los fondos de renta variable internacional de Bestinver, Magallanes, azValor y Cobas en sus primeros 2 años de vida.
La remontada
En plena pandemia, este vehículo fue capaz, además, de recuperar el valor inicial con el que comenzó su andadura, los 100 euros. Ocurrió a finales de noviembre, poco después de que Pfizer devolviera la esperanza con el anuncio de que su vacuna demostraba alta eficacia para combatir el coronavirus.
A partir de ahí, la recuperación del valor liquidativo del fondo fue continúa y solo unos meses más tarde, en marzo de este año, su precio marcó un máximo histórico, en los 115,47 euros, que ha ido renovando día tras día hasta ahora. Tanto es así, que su precio actual se encuentra en los 122,44 euros.
A pesar de las turbulencias del mercado en septiembre, que ha sido el peor mes en lo que llevamos de año, tras abrirse distintos frentes, como la crisis de deuda de la inmobiliaria Evergrande, el bloqueo político en Estados Unidos, el endurecimiento de las presiones inflacionistas por la crisis energética y la incertidumbre sobre la retirada de los estímulos de la Reserva Federal, Tressis Cartera Eco30 ha logrado evitar las pérdidas, y en lo que va de año acumula una rentabilidad del 16,48%.
En la última revisión de la cartera, que se produjo en junio, el fondo se marcó como objetivo empezar a protegerse de la inflación, buscando valores de calidad, más europeos, ligados al consumo, al crecimiento tecnológico, las telecomunicaciones y al ciclo inmobiliario (ver gráfico).
Cómo contratar el fondo
La participación mínima inicial para poder invertir en Tressis Cartera Eco30 es de 100 euros en la clase dirigida a los particulares (clase R), siendo su comisión de gestión del 1,35%. Además, hay una clase de acciones dirigidas a los clientes institucionales y a las carteras de gestión discrecional (clase I), con una comisión de solo el 0,8%. También aplica una comisión de éxito sobre los resultados positivos del producto, del 9%, que tiene por objetivo alinear los intereses de los partícipes y la gestora.
En cuanto a las plataformas en las que se puede acceder a su contratación se encuentra disponible, además de en Tressis, en MyInvestor, Andbank, Mapfre, Openbank y Mutua, que fue de las últimas en incorporarlo.