
El intento de rebote visto en este inicio de semana en las principales bolsas del Viejo Continente sigue, por ahora, siendo una tentativa.
Las ganancias registradas en la sesión de ayer, superiores al 1,5% en muchas de las principales plazas de Europa (salvo en el Ibex, donde los ascensos apenas superaron el medio punto porcentual) han favorecido la entrada de cierto optimismo, sobre todo, después de que las bolsas más débiles del Viejo Continente, como son las plazas de Milán, Madrid y París, a alcanzar la zona de mínimos de diciembre.
Sin embargo, en el mercado, como en la vida real, los arboles impiden muchas veces ver el bosque. "La amenaza de ver una profundización de las caídas que lleve a las plazas más fuertes europea sigue vigente". Así lo asegura Joan Cabrero, analista técnico y asesor de Ecotrader quien pone el foco en las plazas más fuertes de Europa, el EuroStoxx 50 y el Dax.
"No hay que obviar el problema que supone el hecho de que el EuroStoxx 50 todavía no haya alcanzado soportes análogos a los que tocaron las bolsas de España Italia o Francia", señala Cabrero. "Hablamos de los 3.400 puntos, que son los mínimos de diciembre en la principal referencia europea", matiza.
Esto impide descartar la posibilidad de que un eventual rebote en las bolsas europeas sea vulnerable y luego se asista a más caídas que lleven a los índices "más fuertes", como el EuroStoxx 50 y el DAX 30 alemán, a alcanzar finalmente sus mínimos de diciembre, que se encuentran en estos momentos a un 3% de distancia.
Además, el comportamiento del Nasdaq 100, que perdió el viernes los soportes que presentaba en los 13.000 puntos, también ha de ser tenido en cuenta.
"La cesión de soportes en el principal índice tecnológico plantea la posibilidad de que las plazas débiles europeas puedan acabar perdiendo temporalmente esos mínimos de diciembre y eso coincidiría con una caída en las plazas fuertes como Ámsterdam y Frankfurt hacia esos mínimos que marcaron en diciembre", apunta Cabrero