
La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, anunció este martes en la clausura del I Congreso Internacional de Directivos, organizado por la Asociación para el Progreso de la Dirección (APD), que el Tesoro dejará de emitir otros 5.000 millones de euros en el mes de diciembre. Eso supone que la emisión neta se cerrará en 110.000 millones de euros, 20.000 millones menos de los 130.000 que se anunció en primavera como respuesta a las necesidades financieras del Estado para hace frente al Covid-19.
Fuentes del Ministerio de Economía explicaron a elEconomista que, en concreto, se ha eliminado la emisión prevista para el 17 de diciembre de bonos y obligaciones cuya previsión era recaudar unos 5.000 millones de euros. Esta es la segunda ocasión en la que el Ministerio de Economía anuncia que dejará de emitir. El pasado 8 de octubre ya publicó que se reduciría la emisión anual en 15.000 millones de euros.
Las fuentes del ministerio de Calviño explican que la decisión de recortar las emisiones se debe a que ya han empezado a estar disponibles los préstamos comunitarios establecidos en el fondo Sure; a una gestión prudente de las emisiones del Tesoro y a una mejora en los ingresos fiscales del tercer trimestres sobre las previsiones.
El interés que se exige a la deuda de España de referencia -el bono con vencimiento a 10 años- en el mercado secundario se encuentra en el 0,074% -zona de mínimos del año y apenas a 4 puntos básicos del suelo histórico de agosto de 2019, el 0,035%-, a pesar de que la deuda pública total superará el 120% del PIB al cierre del año.
Este sobreapalancamiento, que han acelerado la recesión histórica y el aumento del gasto social derivados de la crisis por la pandemia de coronavirus, no impide que las compras récord del BCE en el mercado y los fondos de recuperación de la UE mantengan la sostenibilidad de la deuda y hayan permitido reducir los objetivos de emisión. De hecho, la prima de riesgo -el diferencial con Alemania- roza mínimos de enero -63 puntos básicos- y el coste medio de toda la deuda en circulación sigue disminuyendo, tras caer del 2% ya en junio.
Un abaratamiento que garantiza que la factura de intereses se mantenga cercana al 2% respecto al PIB en este 2020, por debajo del coste de financiación de Italia, muy lejos del último pico de la crisis del euro, y en línea con la media de la UE.
El pasado martes, el director general del Tesoro, Pablo de Ramón-Laca, adelantó que España aprovechará el inmejorable contexto de tipos en mínimos para colocar una gran cantidad de bonos a principios de 2021. "Vamos a emitir mucho y luego revisaremos a la baja nuestros objetivos según llegue el dinero europeo", afirmó.
Más de 21.300 millones de créditos UE
España tendrá acceso entre este año y el próximo a 21.300 millones de euros en créditos procedentes del fondo Sure de la UE. Esta línea financiera se ha creado para que aquellos estados que lo deseen puedan acceder a dinero más barato para hacer frente a las ayudas laborales por el Covid, en concreto para pagar los Ertes y las ayudas a autónomos. La CE colocó el 20 de octubre 17.000 millones en bonos a 10 y 20 años.