
A día de hoy, los planes de empleo son un vehículo de ahorro al alcance de muy pocos. Solo uno de cada seis trabajadores en España dispone de uno. El Gobierno quiere impulsar su uso creando uno público, con costes competitivos, al que puedan adherirse las empresas. Y, por otro lado, resta atractivo a otra forma de ahorrar para la jubilación dejando todo el protagonismo a estos últimos, al reducir la cantidad deducible de la base imponible con las aportaciones a los planes de pensiones individuales de 8.000 a 2.000 euros.
En cambio, permitirá 8.000 euros para las aportaciones a los planes de empresa. Entre quienes tienen la suerte de tener uno a su alcance, los empleados de CaixaBank y Nestlé son los que se benefician de los dos vehículos más rentables a largo plazo, entre los veinte mayores por patrimonio.
En concreto, y según los datos de Inverco, a cierre del tercer trimestre del año, el plan de los trabajadores de CaixaBank consigue una rentabilidad anualizada del 5,23% en la última década. Está gestionado por VidaCaixa y acoge a casi 47.000 partícipes, que en el último año también ven como este producto lidera el ranking por rentabilidad entre los grandes, al sumar un 1,92% en este periodo. Según los últimos datos disponibles, a fecha de septiembre, el 50,92% de la cartera se encontraba en activos de renta fija, un 33,31% en renta variable, y el resto en inversiones alternativas -un área que cada vez tiene más peso dentro de la industria de inversión colectiva para conseguir rentabilidades más elevadas en un entorno de bajos tipos de interés-.
El plan de empresa de los empleados de Nestlé se sitúa en segunda posición en un periodo de diez años, al obtener un rendimiento anualizado del 4,56%. Como el anterior, también está gestionado por VidaCaixa, aunque en el pasado su gestión estaba en manos de la gestora del Banco Sabadell. Además de su buen comportamiento a largo plazo, el año pasado también fue el plan de empleo más rentable de 2019, al ofrecer una rentabilidad del 13,45%, cuando los 25 mayores ganaron, de media, un 8,09% durante el mismo periodo, según datos de Inverco.
Energéticas y bancos, protagonistas
El tercer puesto es para los empleados de Naturgy, que a diez años obtienen un rendimiento anualizado del 4,38% (está gestionado, de nuevo, por VidaCaixa). Es una rentabilidad superior a la que consiguen los trabajadores de otras compañías energéticas, como pueden ser los 13.400 partícipes del de Endesa, que ocupan el sexto puesto de la clasificación con un retorno del 3,93%, gestionado por la gestora de Ibercaja; o los de Repsol, en octava posición, con un retorno del 3,49%. En el caso de los empleados de Iberdrola, su plan de pensiones de empresa está en la parte baja de la tabla al ocupar el puesto 16 de 20 con rendimientos anualizados del 2,53% a diez años.
Además del anterior, el otro sector en el que son frecuentes la implementación de planes de empleo es el de la banca. Coloca ocho productos entre los veinte mayores. Y, tras el de los trabajadores de CaixaBank, que es el más rentable a largo plazo y en 2020, los empleados de Ibercaja son los que consiguen más rendimiento por su dinero: un 3,44% anualizado en la última década.
En la situación opuesta, el plan de empleo de Telefónica es el que logra rentabilidades más bajas a diez años vista. Está gestionado por Fonditel, una gestora que pertenece al grupo Telefónica que, además de este producto, tiene en su cartelería otros planes de pensiones individuales y también fondos de inversión. En concreto, obtiene un 2,27% anualizado en dicho periodo. En el último año cede, por su parte, un 2,89%. Tras este se encuentra el plan de empleo de Bankia y el de Telefónica Móviles.
No obstante, el vehículo con más partícipes de todos entre los de mayor patrimonio es el de los Funcionarios del Estado, con más de 514.500 inversores. Este producto también está en pérdidas a un año vista, de casi el 3%, mientras que a largo plazo sí que acumula ganancias superiores al 3%. Inferiores a las que suma el plan de los Funcionarios de la Generalitat, que rinde un 4% anualizado en el mismo periodo, una cifra que le sitúa entre los cinco planes de pensiones de empresas más rentables de la última década.