
A falta de pocos días para que acabe el mes de septiembre y dé comienzo el último trimestre de uno de los años más difíciles que se recuerda en bolsa, la mejor recomendación que habría que haber seguido a comienzos del ejercicio era la de estar lejos de la bolsa europea y, especialmente, del Ibex 35 español. "El deterioro sanitario en Europa, los eventos políticos como el Brexit y las elecciones en EEUU; las tensiones entre Trump y China, así como las excesivas valoraciones de índices como el Nasdaq, pintan unas perspectivas sombrías para el cuarto trimestre", auguran desde Natixis.
Sin embargo, si no se siguió en su momento esta directriz y se tiene una parte o la totalidad de la cartera compuesta por compañías del principal índice del país, se hace necesaria una criba para saber dónde estar y, de dónde salir, e incluso dónde hacerse con alguno de los valores a buen precio.
También es una opción muy válida el promediar alguna de esas acciones en las que se está posicionado desde hace tiempo y en las que no se ha encontrado un precio razonable para salir, de forma que acertando con un nivel mucho más abajo, se podrían compensar las pérdidas anteriores sin necesidad de una vuelta al primer precio de compra, algo que podría tardar mucho tiempo en suceder.
A nivel general, el lunes saltaron los primeros soportes del Ibex, en los 6.800 puntos, con lo que se cancelaba, según el asesor de Ecotrader Joan Cabrero, las posibilidades de ver un rebote en el parqué. "El siguiente nivel es importante y son los mínimos de abril y mayo, situados en los 6.420 puntos, que son la última barrera que separa el escenario actual del infierno total que llevaría al Ibex a una vuelta a los mínimos de marzo, en torno a los 5.300 puntos", explica el experto.
Parte de la volatilidad que acompaña al Ibex 35 está siendo provocada por el sector bancario. Las acciones del Santander llegaron a ascender un 3% en los primeros movimientos de ayer, tras anunciar la intención de repartir dividendo para el próximo año, para luego girar a la baja. El resto de bancos también cotizaron con nerviosismo tras sufrir de nuevo el castigo de las informaciones aparecidas sobre grandes grupos bancarios europeos envueltos en blanqueo de capitales. El sector bancario de España ya cotiza en mínimos anuales.
Los que ya han caído
Hay tres valores del Ibex, de los 34 que actualmente conforman el selectivo español (tras la exclusión de MásMóvil) que ya han perdido sus soportes de muy largo plazo, como son Banco Sabadell, Merlin Properties e IAG.
La entidad bancaria se ha quedado como la más pequeña y menos rentable de su sector después de la operación entre Bankia y CaixaBank, y aparece en todas las quinielas para ser la siguiente en ser absorbida por otro actor más grande, como puede ser BBVA. A nivel técnico, "está en caída libre, que es la situación más bajista que existe", explica Joan Cabrero. Operativamente, está en la misma situación que la socimi Merlin, que, sin embargo, todavía expone unos fundamentales atractivos para una gran parte del consenso de expertos, que eso sí, advierten de las dificultades por las que está pasando y pasará el negocio de la compañía en los próximos años.
Por último, el caso de IAG es el del valor, con diferencia, más castigado de toda la bolsa nacional. El desplome del turismo y los viajes intercontinentales (donde es el líder) y entre Madrid y Londres por ser los principales focos actuales de la pandemia en toda Europa ha devastado el valor de su acción y las cuentas de la compañía, hasta el punto de obligarles a realizar una ampliación de capital a un precio al que ya se está acercando el título en el mercado. "Tras perder los 1,2 euros, no vemos de momento un nivel de compra para IAG", explican los expertos de Ecotrader.
Los que están cerca de caer
Cerca de interesantes zonas de compra, concretamente a menos de un 10%, se encuentran Red Eléctrica, Viscofan, Santander y Grifols. La farmacéutica catalana pierde un 26% en 2020, pero en las últimas semanas ha acumulado noticias positivas que refuerzan una posición privilegiada dentro del Ibex en un contexto de recuperación. Se sitúa a cerca de un 6,5% del soporte clave de los 22 euros.
La mejor noticia para la empresas fue la aprobación por parte de la Administración para la alimentación y los medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) de las transfusiones de plasma con anticuerpos a enfermos de Covid-19. Las acciones de la compañía catalana resurgieron con este anuncio. En 2019, obtuvo un 66,5% de sus ingresos en el país norteamericano. La compañía sube casi un 8% desde la zona de mínimos -no vistos desde junio de 2019- en la que estaban hundidas sus acciones pese a que el sector farmacéutico es uno de los ganadores de la crisis de la pandemia de coronavirus, junto al tecnológico.
Viscofan es uno de los valores defensivos por excelencia de la bolsa española. Cotiza por encima de los precios previos al crash del coronavirus tras acumular un rebote de un 29% desde los mínimos de marzo, y se encuentra a alrededor de un 4% de los 55 euros donde ofrece una clara oportunidad de entrar en su capital.
La compañía puede presumir de ser una de las pocas compañías que forman parte del Ibex 35 cuyas previsiones de beneficio neto han sido mejoradas en tiempos de coronavirus. El contexto es muy diferente para Banco Santander. En su caso, se puede hablar sin tapujos de que se ha hundido hasta las puertas del infierno. A un 6% de los 1,5 euros en los que Joan Cabrero señala la zona ideal de compra. También para promediar precios en el supuesto de todos esos accionistas que sufren grandes pérdidas con un valor fuertemente castigado, que pierde un 57% en 2020 y un 65% en los últimos cinco años.
El grupo financiero anunció este lunes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que su objetivo es distribuir un dividendo de 0,10 euros por acción. No obstante, todo queda a expensas del visto bueno del Banco Central Europeo (BCE). Y Joan Cabrero asegura que hay que mirar al banco con una perspectiva de largo plazo, aunque la situación actual sea muy complicada para el sector.
En el limbo
En el limbo, alejadas de los infiernos que se convierten en zonas históricas de compra, surgen 18 compañías de la bolsa española. Entre ellas, destaca la última incorporación al Ibex 35, Pharma Mar. Repunta un 147% y deja el precio clave de los 71 euros a casi un 30%.
Las estimaciones de beneficio de los analistas de la farmacéutica gallega se han duplicado desde enero. Si a principios de año los pronósticos indicaban que en 2020 registraría unas ganancias netas de 74 millones de euros, ahora se espera que sobrepase los 150 millones. La clave: el potencial de la aplidina como antiviral, incluso para el Covid-19, a la espera de su aprobación.
Inditex, tras presentar sus resultados correspondientes al primer semestre del ejercicio fiscal de 2020, se sitúa como una oportunidad de compra desde el punto de vista fundamental, pero a un 24% de los 18,5 euros donde Joan Cabrero marca su infierno bursátil. En el ejercicio, se deja un 23%.
El grupo textil gallego es la preferida para los analistas entre sus competidores directos, la propietaria de Uniqlo -Fast Retailing- y H&M, que reciben la recomendación de mantener, pero la incertidumbre no abandona su negocio, pese al crecimiento de las ventas online.
Sin duda, Telefónica es uno de los ángeles caídos más llamativos, y aún puede profundizar más en sus descenso a los infiernos: se encuentra a un 15% de su soporte clave, los 2,55 euros, según apunta el estratega de Ecotrader. Tras ser excluida del EuroStoxx 50, pierde un 51% en 2020.
Otra cara muy diferente dentro del Ibex 35 es la de Siemens Gamesa, que es la compañía del principal índice español que más cerca cotiza de sus altos del año. El fabricante de aerogeneradores escala en lo que va de año un 39% y es el tercer valor más alcista tras Cellnex, que suma un 44%, y Pharma Mar.
El soporte del infierno de Siemens Gamesa aparece en los 18 euros, a un 18% de los precios actuales, mientras que el de la compañías de torres de comunicación está en 40 euros, a un 23%.
A salvo, de momento
Pese al mal momento que vive, de forma general, la bolsa española, todavía hay hasta nueve valores que resisten lejos de sus soportes clave. Entre ellos, destaca la presencia de tres bancos: Bankia, CaixaBank y BBVA. Los dos primeros se han alejado del infierno gracias a la fusión y han dejado ese nivel a un 47% y un 32%, respectivamente, mientras que la entidad con sede en Vizcaya debería caer un 31% para perderlo. También están en este grupo de empresas en las que el riesgo es moderado Meliá y Amadeus, pese a que son dos de las firmas más castigadas en bolsa durante los últimos meses, y esto, gracias a que en los últimos años se han situado en la cara opuesta, siendo de los valores más destacados en el Ibex. De hecho, estas dos, junto con IAG, son las compañías en las que los expertos esperan las mayores pérdidas para este ejercicio, según los datos del consenso que recoge FactSet. Además de estos, Mapfre, Repsol, Colonial y ArcelorMittal también se encuentran a más de un 30% de perder soportes, después de los recientes rebotes en bolsa.
El riesgo de la descorrelación dentro del Ibex
Aunque mecidos y arrastrados por la gestión pasiva e indexada existe cada vez más una correlación directa entre los movimientos del índice Ibex y de sus valores, de cara a este escenario, el índice solo está a un 4% de perder los soportes de los 6.420 puntos, mientras que, de media, las compañías que todavía no los han perdido se encuentran a a algo más de un 23% de cederlos. Esto podría suponer otro contrapeso en contra del Ibex si es que se da el caso de que los valores vayan a buscar este suelo marcado, presionando al propio índice hacia sus mínimos del año, hasta los cuales tiene un 20% de caída desde los niveles actuales. Otro factor pesimista es lo que está ocurriendo a nivel sectorial con la banca europea. Tal y como explica Carlos Almarza, asesor de Ecotrader, el sectorial Stoxx Europe 600 Banks "ya ha perdido los soportes de los 225 puntos y se encuentra a un paso de volver a poner a prueba los mínimos de marzo, abril y mayo. Mucho nos tememos que si el EuroStoxx cae a los 3.000 puntos, la banca caiga a mínimos de 2009", concluye.