
Ayer, el mercado europeo asistió al enésimo fracaso del EuroStoxx 50 a la hora de superar la resistencia que encuentra en los 3.377 puntos. Como ya ocurriera hace tres semanas, cuando esta cota frenó los ascensos en el selectivo europeo, la cercanía a este nivel ha acabado desembocando en una caída que ha aproximado de nuevo a la principal referencia continental a la zona de los 3.250 puntos.
"Se trata de la actual tangencia con la directriz alcista de la cuña que hace semanas venimos dibujando y cuya resolución nos indicará la dirección más probable que tomarán las bolsas europeas en próximas semanas", indica Joan Cabrero, asesor de Ecotrader.
Es decir, la pérdida de los 3.250 puntos junto con el soporte clave de los 3.220 puntos confirmaría la resolución bajista de esa cuña ascendente y abriría la puerta a un contexto de caída hacia la zona de los 3.000-3.055 puntos, que está a más de un 6,5% de distancia de los niveles de cierre de ayer.
En el Ibex 35, las pérdidas registradas tras un inicio de sesión al alza fueron abultadas, y sirvieron para tirar por tierra gran parte de las ganancias mensuales acumuladas durante el mes de agosto. De hecho, el saldo mensual que arroja el selectivo español en el mes estival por excelencia es de unas ganancias del 1,30%, "muy pobre si lo comparamos con el resto de bolsas europeas y sobre todo norteamericanas, lo cual refleja a la perfección la debilidad de la renta variable española", matiza Cabrero.
"El estacazo que sufrió ayer el Ibex 35 llevó al selectivo español a poner a prueba de nuevo la directriz alcista de aceleración que surge de unir los mínimos de mayo y agosto, que discurre por los 6.900 puntos, cuya cesión sería de todo menos algo alcista para la renta variable española y haría que aumentara el riesgo de que acabe tomando cuerpo el escenario que hace meses venimos manejando, concretamente el que defiende que el Ibex 35 podría dirigirse a buscar apoyo a los mínimos de abril y mayo en los 6.420 puntos antes de intentar formar un movimiento alcista fiable y sostenible en el tiempo", explica el analista técnico.
Pendientes de la fortaleza del euro
La reacción de las bolsas continentales a la publicación de los datos de PMI de Alemania, España, Francia e Italia en la eurozona, así como a las cifras de empleo e inflación en el conjunto de Europa será clave para identificar el rumbo que toman unos mercados continentales que siguen sin obviar la fortaleza del euro.
El euro/dolar se mantiene al alza y ya ha marcado su nivel mas alto desde mayo de 2018 poniendo de manifiesto su contrastada capacidad de mantener el pulso alcista. De hecho, por técnico no se descartan "mayores alzas hacia objetivos que manejamos en los 1,2550 y no descartamos incluso la búsqueda de objetivos como son los 1,28-1,30 dólares por euro", afirma Cabrero, algo que encajaría con una vuelta del índice dólar a los mínimos de 2018.