
Liderados por Arabia Saudí y Rusia, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y sus aliados se reúnen mañana y el viernes en Viena con la intención de llegar a un consenso para acordar restringir su oferta de petróleo y apuntalar así el precio del barril. La pregunta es cuántos barriles por día dejarán de producir y cuándo comenzarán a ejecutarse los recortes de forma efectiva. La OPEP también debe evaluar la posible reacción de Donald Trump, presidente de EEUU, que está prestando gran atención a los movimientos del cártel, como ha vuelto a demostrar hoy con otro tuit animando a la OPEP a mantener los grifos del petróleo abiertos.
Un día antes de la 175 conferencia ministerial de la OPEP, el grupo no ha dado señales de disenso en cuanto a la visión de que habría que retirar barriles del mercado para evitar una oferta excesiva y el consiguiente abaratamiento del llamado 'oro negro'.
Pero el desafío para que los 24 países participantes logren la requerida decisión unánime está en los detalles, como el nivel de bombeo que se tomará como base o cuánto rebajará cada uno.
"Espero que todos, los (15) de dentro y (los 9) de fuera de la organización, apoyen los requisitos que necesitamos para hacer equilibrar el mercado", ha asegurado a la prensa en Viena el presidente de turno de la OPEP, Suhail bin Mohamed Faraj al Mazuei.
Tras mostrarse "optimista" sobre la posibilidad de alcanzar un acuerdo, el también ministro emiratí de Petróleo resaltó que "hay un requerimiento de ajuste a la baja". "Cuál será ese ajuste, y desde qué nivel hay que hacerlo, eso es lo que será discutido y esperamos una decisión", afirmó.
Los analistas consultados por EFE en vísperas del encuentro destacan que el mercado cuenta ya con un anuncio de un recorte de entre 1 y 1,5 millones de barriles diarios (mbd), después de que el Comité Económico de la OPEP haya recomendado una rebaja de 1,3 mbd.
Los analistas de Eurasia Group creen que los recortes podrían alcanzar los 1,5 millones de barriles en la parte alta de la horquilla. "El fuerte incremento de la producción por parte de Arabia Saudí ha sido probablemente una herramienta de Riad para presionar en la reunión de Viena un acuerdo", explican estos expertos a la CNN.
Con este movimiento, Arabia Saudí ha conseguido dos cosas: por un lado ha derribado los precios del petróleo inundando los mercados, y por otro cuando se planteen las cuotas de recortes que debe asumir cada país Arabia Saudí partirá de una posición muy alta.
¿Y si no hay acuerdo?
Y si bien advierten de que una falta de acuerdo puede causar un considerable desplome de los precios, reconocen que la situación es compleja, con diversos desafíos, entre los que destacan el auge de la explotación de petróleo de esquisto en Estados Unidos.
La primera potencia mundial y ya productor de crudo número uno del planeta es el principal rival de la alianza que, apodada "OPEP+", se forjó hace dos años entre la organización y otros productores para lograr la recuperación de los "petroprecios", tras el desplome de cerca del 80% que experimentaron entre 2014 y 2016.
"Lo más probable es que haya algún recorte de producción. Dudamos sin embargo de que la reducción vaya a ser profunda y convincente, sobre todo debido a los detalles técnicos", indica David Wech, director ejecutivo de la asesora vienesa JBC Energy.
"La compleja situación política y el llamamiento público de (Donald) Trump para precios moderados, por lo menos no ayudan a la OPEP+ a la hora de establecer fuertes restricciones de producción. También Rusia se muestra algo vacilante hacia cambios fuertes", explica.
Hopefully OPEC will be keeping oil flows as is, not restricted. The World does not want to see, or need, higher oil prices!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 5 de diciembre de 2018
Más optimista se manifiesta Yousef M. Alshammari, de la asesora londinense Ucergy Analysts, quien afirma que "incluso una rebaja moderada, en torno a los 200.000 barriles diarios" por parte de Rusia ayudaría a reequilibrar el mercado.
"Creo que los indicadores de que habrá un recorte son más fuertes que las señales de que podría no lograrse un acuerdo, aunque aún no se puede descartar nada", dice el experto.
Fue sobre todo el reciente anuncio de que Riad y Moscú acordaron prolongar más allá de fin de año su cooperación petrolera lo que fortaleció en los mercados la expectativa de un recorte.
El presidente ruso, Vladímir Putin, dio a conocer ese pacto el pasado sábado durante la cumbre del G20 en Buenos Aires, donde se reunió con el príncipe heredero saudí, Mohamed bin Salmán.
Las reuniones de esta semana (de la OPEP mañana, y de la OPEP+ el viernes) están marcadas por la enorme volatilidad del valor del petróleo en los últimos meses y el sopresivo abandono de Catar de la organización, anunciado el pasado lunes.
La cotización del barril del crudo Brent, que inició la sesión de este miércoles a 61,11 dólares, llegó a superar los 86 dólares a principios de octubre, antes de caer a menos de 60 dólares el pasado viernes y repuntar el lunes más del 4%.