Abengoa ha presentado formalmente la petición de rescate a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) para inyectar 249 millones a su filial Abenewco 1, que tiene todos los activos productivos de la compañía. Para sellar la ayuda financiera pública, la compañía sevillana contará con el apoyo del fondo TerraMar Capital LLC que inyectará 200 millones a cambio de quedarse con el 70% del capital de la filial al final del proceso refinanciación.
Según ha informado la compañía a la Comisión Nacional de Mercado de Valores (CNMV), la empresa finalmente se ha abierto a solicitar ayuda al Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas, creado por el Gobierno para ayudar a compañías impactadas por la pandemia y dotado con 10.000 millones de euros.
Un plan en tres fases con un fondo de Los Angeles como protagonista
El rescate de la SEPI forma parte de un plan de tres fases planteado por Abengoa para preservar estos activos y mantener operativa una filial en la que se encuentra el negocio de la compañía y sus cerca de 13.000 empleados.
En la primera fase abordará la financiación interina y el avance de nueva línea de avales. En este punto, Abenewco 1 recibiría 35 millones de euros en forma de préstamo por parte de TerraMar, un fondo de Los Angeles especializado en invertir en empresas en quiebra o en situaciones complejas que ha ofrecido a Abengoa 150 millones de euros en forma de préstamo y 50 millones de euros en forma de aportación de capital a Abenewco 1.
También en este primer paso, la compañía, prevé disponer de un avance de una nueva línea de avales por un importe inicial de 40 millones de euros así como la suscripción de un nuevo contrato de restructuración y los compromisos de financiación en dinero y avales con la garantía ICO y CESCE.
En la segunda fase, Abenewco 1 pretende implementar un nuevo acuerdo de reestructuración en línea que implicarían capitalizaciones y quitas y realizando las modificaciones oportunas para incluir la ejecución de la operación de inversión por TerraMar, que haría su segundo desembolso por valor de 115 millones de euros. En este punto, Abenewco 1 realizaría una ampliación de capital que suscribiría TerraMar para obtener el 70% del capital social de Abenewco 1.
La reestructuración de esta fase 2 implicaría un cambio en la estructura de capital de Abenewco 1, pasando a ser accionistas los principales acreedores de Abenewco 1 y el nuevo inversor. Esto rompería el grupo contable del que ahora es matriz la sociedad y el grupo pasaría a estar encabezado por Abenewco 1
En este mismo periodo, detallan, Abenewco 1 estimaría tener disponible una financiación sindicada bancaria similar a la firmada y anunciada en agosto 2020 ('Financiación ICO'), con cobertura ICO por el 70% del importe, de acuerdo con las medidas aprobadas por el Gobierno ante el covid, y una nueva línea de avales por un importe de hasta 300 millones de euros como ampliación del avance realizado en la fase 1.
Demostrar que el covid desató la crisis
Y en tercer lugar, el rescate de la SEPI por valor de 249 millones de euros. Cabe recordar que para que el rescate de la SEPI sea concedido, Abengoa tendrá que demostrar que la empresa no estaba en crisis antes de la pandemia sino que se ha desatado a consecuencia de esta. En la nota remitida a la CNMV se informa igualmente de que La concesión de la ayuda queda pendiente de que SEPI, y los demás órganos competentes completen sus procedimientos internos.
Además, hay que tener en cuenta que la Sociedad está pendiente de la resolución del Tribunal de Instancia Mercantil competente sobre la designación de un administrador concursal, por lo que no se está planteando medida alguna más allá de la solicitud por parte de la propia empresa.
La noticia confirma el anuncio de hace una semana en el que Abengoa informó de que estaba trabajando en una solución alternativa y que había iniciado conversaciones y negociaciones con instituciones públicas y entidades privadas cuya participación se hacía "imprescindible a los efectos de poder cerrar la nueva operación financiera que garantice la estabilidad y el futuro del grupo de sociedades".
De ahí que la empresa decidiera extender hasta el 31 de marzo el límite para alcanzar un acuerdo de reestructuración de deuda con los proveedores del grupo encabezado por Abengoa Abenewco 1 tras obtener el apoyo mayoritario de los proveedores adheridos al mismo (solo el 0,17% de los proveedores votaran en contra).
Solicitó el concurso en febrero
La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, ya señaló que el Gobierno estaba "trabajando" para poder rescatar a Abengoa y, además, pidió a la Junta de Andalucía que asumiera su responsabilidad, desatando un cruce de reproches entre la Administración central y el Gobierno regional.
El 22 de febrero, Abengoa solicitó la declaración de concurso voluntario de acreedores tras no lograr que los acreedores financieros le otorgaran los consentimientos para extender de nuevo el plazo para el cierre y ejecución del acuerdo de reestructuración.
La deuda financiera a cierre de 2019 de Abengoa, último ejercicio con datos reportados por la compañía -que lo hizo hace apenas una semana con casi un año de retraso y tras abrir expediente la CNMV- ascendía a 4.783 millones de euros, aunque se elevaba hasta casi 6.000 millones si se tenían en cuenta 1.165 millones de euros correspondientes a deuda de proyectos en venta.