Elon Musk se ha convertido en una de las personas más influyentes del planeta por sus proyectos con Tesla y SpaceX. Su carácter, además, ha provocado que en torno a él se fabrique un aura de excentricidad que alimenta las ganas de saber más del personaje. El propio Musk fomenta esto y, de cuando en cuando, va soltando pequeñas píldoras sobre sí mismo. Incluso sobre sus horarios.
El empresario desveló cuál es su rutina de sueño en el podcast de Spotify de The Joe Rogan Experience. En él, cuenta que ha decidido dedicar solamente el tiempo imprescindible para dormir, unas seis horas, con el objetivo de seguir siendo productivo en su trabajo.
"Intenté dormir menos, pero luego la productividad total disminuye", aseguró Musk, que en otras entrevistas en el pasado ya reconoció que soportó ritmos de trabajo extenuantes que supusieron un riesgo real para su salud. El fundador de Tesla explica que a menudo se encuentra en reuniones que terminan a la una o las dos de la madrugada, aunque esto no suele ocurrir los fines de semana.
Por todo esto, cree que puede mantener una actividad constante de trabajo sin que repercuta en su salud. Con seis horas le vale: "No me encuentro con ganas de dormir más (...) Trabajo mucho".
Los últimos meses han estado cargados de actividad para Musk, que ha supervisado el aumento de la producción del Model 3 y el Model Y, un cambio en el ritmo de la cadena de montaje que hizo que se diesen pequeños problemas en la pintura y el espacio interior de los vehículos.
También con Tesla, Musk se ha adentrado en la inversión en el bitcoin, que por el momento le está propiciando jugosas ganancias pero que, al mismo tiempo, se trata de una apuesta pionera y arriesgada.
Pero no solo Tesla: su firma Neuralink sigue trabajando en su proyecto de mejorar el acceso a los dispositivos electrónicos a las personas con movilidad reducida o amputaciones (de momento las pruebas, algo perturbadoras, se están dando en monos que juegan al pong con la mente) y Starlink profundiza su red de satélites para proporcionar un servicio de internet global con la ayuda de la infraestructura de Space X.
En definitiva, una pléyade de proyectos para una mente que es prácticamente incapaz de descansar. Una actividad que aún así necesita cierto descanso que la sustente...pero no demasiado. Solo seis horas. Elon Musk no necesita dormir más.