
La gran industria, con una facturación de 280.000 millones de euros, reclama al Gobierno un programa de medidas urgentes para recuperar la actividad económica sobre cinco ejes: inversión pública en infraestructuras, vivienda pública y rehabilitación; estimulación de la demanda de automóviles; reducción fiscal a sectores sometidos a competencia internacional; rebaja de costes energéticos; y potenciación de la exportación.
La Alianza por la Competitividad de la Industria Española -constituida por ANFAC (automoción), AOP (refino), ASPAPEL (papel), FEIQUE (química y farmacia), FIAB (alimentación y bebidas), OFICEMEN (cemento) y UNESID (siderurgia)-, responsable del 50% del PIB industrial y del mantenimiento de 2,9 millones de empleos de calidad, ha emitido una nota de prensa que recuerda al Gobierno el importante papel de la industria en la economía y la necesidad de recuperar la actividad económica para superar la crisis provocada por el Covid-19.
La Alianza, que ya reclamó más medidas contra la pandemia, se vuelve a pronunciar ahora, justo después de que se haya levantado la hibernación de la economía. En su nota considera necesario impulsar progresivamente todas las actividades industriales y el sector de la construcción, "para que ejerzan su fundamental papel tractor de la economía, adoptando medidas urgentes que paralelamente estimulen la demanda y la competitividad de las empresas".
Por eso, cree "improrrogable" que la Vicepresidencia Económica -ostentada por Nadia Calviño- y el Ministerio de Industria -dirigido por Reyes Maroto- "activen y lideren" un programa de medidas de rápida implantación, apoyadas en cinco ejes:
Cinco ejes prioritarios
1.- Impulsar la inversión pública en infraestructuras, vivienda pública y rehabilitación. Se trata de una medida clásica para superar las crisis económicas graves, como el célebre New Deal lanzado por Roosevelt en EEUU para superar la crisis de 1929.
2.- Estimular de forma efectiva la demanda del automóvil. En España es una industria clave, responsable del 10% del PIB, con enorme capacidad tractora sobre el resto del tejido productivo, que se ha paralizado totalmente con la explosión de la pandemia.
3.- Reducir de forma coyuntural las cargas impositivas de los sectores sometidos a competencia internacional, al objeto de proteger la debilitada industria y facilitar la venta de su producción.
4.- Adoptar medidas que incidan en la reducción de los costes vinculados a la energía, como la suspensión del impuesto a la generación del 7% -que repercute en el precio final de los consumidores- o la garantía de compensación de los costes indirectos de CO2, algo previsto, pero pendiente de aprobar.
5.- Promover medidas que favorezcan el acceso a los mercados internacionales y potencien la actividad exportadora.
La Alianza concluye subrayando que considera imprescindible el establecimiento de un programa concreto de medidas capaces de incrementar la demanda a nivel nacional y mejorar la competitividad de nuestras empresas en el mercado internacional.