
El exgobernador del Banco de España, Luis María Linde, ha restado valor al papel que tuvo el Banco de España en la ampliación de capital de 2016 del Popular y ha asegurado que era al Banco Central Europeo (BCE) a quien le correspondía la supervisión de la entidad, según informan fuentes jurídicas a este diario. Linde ha acudido a las 9 de la mañana de este miércoles a declarar como testigo en la Audiencia Nacional por la caída del banco en junio de 2017.
Elvira Rodríguez, presidenta de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) en dicha fecha, declaró la semana pasada, también como testigo, que el organismo, antes de autorizar la ampliación de capital del banco en mayo de 2016 por 2.500 millones, pidió información al Banco de España para conocer si la solvencia de la entidad era la adecuada y si podía asumir las provisiones necesarias en ese momento. El Banco de España autorizó la operación.
Linde ha asegurado hoy que el papel de la institución que entonces gobernaba fue de mero "enlace" entre el BCE y la CNMV. Además, ha destacado que la decisión de ampliar capital la tomó el propio Popular, no el organismo que encabezaba.
Todos los inversores, tanto minoristas como institucionales, que acudieron a la ampliación de capital de la entidad perdieron todo su dinero en junio de 2017, junto al resto de los inversores, después de que la Junta Única de Resolución (JUR) europea interviniera el banco. Varias juzgados menos ya han fallado que las cuentas de la entidad de 2016 eran falsas y han dictaminado que el Santander, sucesor del Popular tras adquirir la entidad por un euro, debe devolver la inversión a los afectados. La Audiencia Nacional mantiene desde octubre de 2017 una investigación penal por el fin de la entidad dividida en dos fases. La primera parte investiga si las cuentas del banco de 2016 eran falsas y no reflejaban la realidad fiel de la entidad. La segunda se centra en la era de la presidencia de Emilio Saracho e investiga si hubo manipulación del mercado.
Por otro lado, Linde explicó que el Banco de España no tuvo ninguna implicación en la resolución de la entidad, decisión que tomó íntegramente la JUR, aseveran las mismas fuentes. Según el exgobernador, el único papel que tuvo el organismo supervisor nacional fue requerir liquidez de urgencia (ELA) al BCE en los últimos días del Popular, ante la dificultad de afrontar el negocio por la fuga masiva de depósitos que vivió entre abril y junio de 2017.