
ACS ha alejado el objetivo de cerrar 2019, por primera vez en su historia, con un beneficio neto de más de 1.000 millones de euros, una cifra que hace apenas tres semanas se presumía sobrepasada ampliamente. El motivo es la provisión realizada por el grupo que preside Florentino Pérez en sus cuentas consolidadas por la decisión de su filial australiana Cimic de no continuar prestando apoyo financiero a su participada en Oriente Medio BICC (Dubai BIC Contracting). Esta medida generará un impacto negativo de 400 millones de euros en los resultados del último ejercicio y en esa cantidad se incluye la totalidad de los riesgos contraídos por la empresa.
ACS destacó este jueves en un comunicado que este impacto "será compensado" por la mejora en los resultados operativos y por las plusvalías obtenidas en 2019, por lo que el beneficio anual del grupo, reconoció, superará los 950 millones de euros, "en línea con lo previsto". El objetivo, no obstante, era alcanzar los 1.000 millones de euros, tal y como reconocieron sus máximos ejecutivos durante el pasado ejercicio.
Este reto, en realidad, ya se lo impuso en 2016, sin que hasta la fecha haya podido superarlo. Con todo, habrá que esperar a la formulación de las cuentas para conocer las ganancias definitivas.
La multinacional española se anotó un beneficio de 769 millones de euros en los nueve primeros meses de 2019, con un incremento del 11,2%. Unos números que le colocaban en la senda directa hacia la cota de los 1.000 millones. Al crecimiento acumulado hasta septiembre contribuyeron todas las actividades del grupo, pero también, y con una incidencia muy significativa, Abertis, que aportó 193 millones. En el cuarto trimestre, además, añadirá jugosas ganancias por desinversiones.
Castigo en bolsa del 5,34%
El miércoles ACS anunció la venta a la portuguesa Galp de sus plantas solares en España por 750 millones, con una plusvalía de 330 millones que se registrará en el resultado de 2019. A ello añade 60 millones de ganancias por desinversiones de autopistas en España y Estados Unidos en el último trimestre. Son 390 millones para cumplir el objetivo de los 1.000 millones, sin embargo, la provisión de Cimic supone un revés en la consecución del mismo. En ingresos y ebitda no tendrá efecto y mantendrá la retribución al accionista del 65% del beneficio neto.
El mercado penalizó este jueves las acciones de ACS con un caída del 5,34%, hasta situarse en 31,9 euros, en mínimos de un año.