El presidente de Foment del Treball, Josep Sánchez Llibre, no ve oportuno el debate sobre el aumento del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) en el contexto de crisis actual y considera que la administración debería centrarse primero en otorgar ayudas para reanimar a las empresas más afectadas.
Así lo ha asegurado el presidente de la patronal durante la presentación de un informe de evaluación de políticas públicas presentado por Foment del Treball. "Cuando estén los sectores salvados, ya hablaremos de salario mínimo", ha comentado Sánchez Llibre, que ha añadido que "hay empresas que están en una situación agónica y precisan ayuda hoy mismo".
Mañana se abre el diálogo social
La ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, cree que sería recomendable que en 2021 se produjera una subida del Salario Mínimo Interprofesional, algo que defienden también los sindicatos CCOO y UGT. Precisamente este martes se abre el diálogo con patronal y sindicatos sobre la subida del SMI.
La ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, ya ha dejado clara su intención de subir el salario mínimo el próximo año, mientras que los sindicatos piden que llegue a los 1.000 euros (actualmente está en 950 euros) y la CEOE cree que no es momento de abordar este asunto, sino de hacer frente a las consecuencias de la pandemia. "No sería comprensible que nos alejáramos de Europa cuando se han subido salarios de empleados públicos y pensionistas un 0,9%. No podemos dejar descolgados a los trabajadores, que son los que más lo necesitan", dijo la semana pasada en una entrevista el pasado viernes en TVE.
Díaz subrayó además que en 42 años de democracia el salario mínimo nunca se ha congelado, salvo con Mariano Rajoy como presidente del Gobierno, cuya política, ha denunciado, se basó "en los recortes, la austeridad y en la devaluación de los salarios".
En la actualidad, de los 27 países que conforman la Unión Europea, 21 tienen fijado un salario mínimo, exceptuando Austria, Chipre, Dinamarca, Finlandia, Suecia e Italia. Hasta el momento, la mayoría de los países del entorno español han pactado subidas del salario mínimo de cara al próximo año pese a la situación provocada por la pandemia mundial.