La economía del Reino Unido sufrió en los tres primeros meses del año una contracción más profunda de lo estimado inicialmente con una caída del producto interior bruto (PIB) del 2,2%, dos décimas más del dato calculado inicialmente, lo que representa la mayor pérdida de actividad económica desde 1979 como consecuencia del impacto inicial de la pandemia de covid-19, según la Oficina Nacional de Estadística (ONS) británica.
En comparación con el primer trimestre de 2019, la economía del Reino Unido registró una caída del PIB del 1,7%, según la oficina estadística.
En el primer trimestre de 2020, el sector servicios registró una caída récord del 2,3%, mientras la producción experimentó una contracción del 1,5% y la construcción del 1,7%.
A su vez, el consumo de los hogares británicos registró entre enero y marzo una bajada del 2,9%, la mayor caída desde el tercer trimestre de 1979 como reflejo del menor gasto en calzado, transporte, restaurantes y hoteles, mientras que aumentó el gasto en alimentación y bebida.
Por su parte, la formación bruta de capital fijo registró una caída del 1,1% como reflejo de la bajada de la inversión gubernamental y de la inversión de las empresas.
"Todos los principales sectores de la economía se redujeron significativamente en marzo a medida que los efectos de la pandemia golpearon (...). La fuerte caída en el gasto del consumidor a finales de marzo condujo a un notable aumento en los ahorros de los hogares", señaló Jonathan Athow, estadístico nacional adjunto de la ONS.
A principios de mes, la ONS informó de que el PIB sufrió en abril, el primer mes completo del confinamiento, una contracción económica récord del 20,4%, a raíz del cierre de comercios, bares, restaurantes y fábricas del país, que tuvieron que suspender la tarea de sus trabajadores ante la repentina ausencia de ingresos.