
La pelea de las entidades representantes de los trabajadores por cuenta propia y de las pequeñas y medianas empresas de nuestro país se ha saldado con un paquete de medidas destinadas a amortiguar el impacto de la crisis sanitaria y económica provocada por la pandemia de coronavirus. Entre ellas, la más importante está el aplazamiento de la cuota del mes de marzo -que incluye devoluciones para los cobros ya realizados-, además de las bonificaciones de la cuota por ceses de actividad y ayudas por caída de la recaudación a cuenta del frenazo productivo impuesto por el Gobierno para frenar la expansión de los contagios.
En este sentido, una de las medidas que se habían articulado ya es la flexibilización del acceso a los ERTE como herramienta para mantener el empleo en hibernación hasta superar la peor fase de la crisis y así conservar a la postre el mayor número de puestos de trabajo posible. Medida que además iba acompañada de una exención de las cuotas a la Seguridad Social de los empleados afectados por la medida.
Sin embargo, parece que los resultados no están siendo los esperados para un tejido productivo, el español, donde más de un 99% de las empresas son pymes y por lo tanto, cuentan con un menor músculo financiero que las grandes compañías para afrontar periodos de falta de liquidez en la economía. Así, según un análisis de Cepyme hasta ahora afectan a casi 1,6 millones de trabajadores, de los que tan sólo cerca de 720.000 trabajadores corresponden a la pequeña y mediana empresa. De hecho, tan solo está afectando al 5% del empleo de la pyme hasta ahora, "por lo que preocupa que la adaptación de la pequeña y mediana empresa no se lleve a cabo a través de estas herramientas, sino que supongan su cierre definitivo", apuntan desde la patronal de la pequeña y mediana empresa.
En este sentido, un 16,5% de las empresas (245.111 empresas) ha presentado un ERTE hasta ahora, de las que un 80% son pymes. La presentación de estos expedientes afectan por ahora al 11,8% de los trabajadores por cuenta ajena (1.592.030), de los que tan sólo se desprende que el 45% (720.000) corresponde a trabajadores de la pequeña y mediana empresa, según se desprende de un análisis estimativo llevado a cabo por Cepyme sobre la tramitación del número de Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) de pymes que se están poniendo en marcha en cada territorio.
Dificultades en la solicitud
En cuanto a las principales dificultades encontradas por las empresas a la hora de tramitar un ERTE, desde Cepyme apuntan la gran incertidumbre hacia esta medida por la condicionalidad establecida de mantenimiento del empleo en un plazo tan acotado de tiempo.
Por un lado, influye el hecho de que los ERTEs por fuerza mayor tan sólo sean válidos durante el periodo en el que esté en vigor el Estado de Alarma y también el compromiso de mantenimiento del empleo en un periodo en el que las expectativas de reanudación de actividad en las empresas estará condicionada por una reactivación de la economía en general. "En este punto, desde la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa se hace cada vez más necesario ampliar la extensión de esta herramienta y ligarla con el aumento de la actividad empresarial y no sólo con el periodo de estado de alarma. De forma paralela, muchas empresas destacan la falta de claridad en las causas por las que una empresa afectada por la crisis actual puede tramitar un ERTE en este momento", señalan en un comunicado.
"De hecho, nos han trasladado la denegación de numerosos ERTEs tramitados por fuerza mayor debido o bien a que no cumplían los criterios exactos de esa causa o bien a problemas en la presentación de la documentación. En este punto, cabría señalar que la crisis del Covid-19 está suponiendo un parón horizontal de la economía que afecta a todos. Esta paralización de la actividad que afecta económica, productiva u organizativamente a muchas empresas, que quedan relegadas en estos momentos de poder acogerse a los expedientes por fuerza mayor, creando una fuerte discriminación entre las empresas afectadas todas ellas por esta situación", apuntan desde la organización presidida por Gerardo Cuerva.