Redactor de Internacional. Aprendí a cubrir economía en Argentina, aunque mi pasión siempre ha estado en Reino Unido y EEUU, en las que me centro actualmente, porque si algo no son precisamente estos dos países es aburridos. Estudio sobre el bitcoin y el universo de ideas y fraudes que ha crecido alrededor en mis ratos libres.

El presidente ruso, Vladímir Putin, ha acordado este martes detener durante 30 días los ataques a las infraestructuras energéticas de Ucrania tras la conversación telefónica con su homólogo estadounidense, Donald Trump. El presidente de EEUU ha ofrecido "acuerdos comerciales enormes" a Rusia si se consigue la paz.

Tesla va de castañazo en castañazo. La firma de Elon Musk ha perdido la mitad de su valor bursátil en apenas tres meses, y este martes se ha encontrado con una tormenta perfecta llegada desde China que extiende la montaña rusa bursátil en la que vive desde el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca. La compañía está sufriendo caídas de más del 5% por culpa de un anuncio de una rival china, Zeekr, que pondrá en marcha el próximo mes un sistema de conducción autónoma de 'nivel 3', superior al que ofrece la estadounidense; y de otra, BYD, que ha presentado unos cargadores ultrarrápidos aún mejores. Y a eso se ha sumado un castigo de Canadá, que ha retirado a Tesla de la lista de coches eléctricos que pueden recibir varias subvenciones gubernamentales, en una respuesta a la guerra comercial y las amenazas de anexión lanzadas por Trump.

En poco más de mes y medio, Trump ha logrado despertar el monstruo más temido de la economía: la estanflación. Sus idas y venidas con los aranceles han despertado el miedo a que EEUU entre en recesión, a la vez de disparar las expectativas de un escenario inflacionista, con las dificultades que planea para el comercio. Además, está despertando el riesgo de que se acabe trasladando a las economías de todo el mundo, con precios más elevados en muchos productos.

¿Qué es un arancel? Pese a su amor por ellos, Donald Trump y su equipo no parecen tener del todo clara la respuesta a esta pregunta. Tampoco parecen entender para qué sirve el comercio internacional, ni las tendencias macroeconómicas que hacen que EEUU tenga un déficit en la balanza comercial, ni que ese hecho sea positivo y una de las claves de la riqueza de este país. Un fallo catastrófico a la hora de entender cómo funcionan los aranceles parece estar detrás de una guerra comercial que amenaza con provocar recesiones en EEUU y medio mundo, pero que tendría sentido si estos impuestos funcionaran de la forma que Trump, equivocadamente, cree que funcionan.

La guerra arancelaria desatada por Donald Trump ya tiene una respuesta oficial por parte de Canadá. El ministro de Finanzas, Dominic LeBlanc, ha anunciado que el país impondrá aranceles por valor de algo más de 20.000 millones de dólares en productos estadounidenses, y ha prometido que buscará "coordinarse" con la Unión Europea para hacer una respuesta conjunta.

Donald Trump escala la batalla contra Canadá. Después de que ayer la mayor provincia del país norteño, Ontario, anunciara un recargo del 25% para la electricidad que vende a EEUU como respuesta a los aranceles del magnate, el presidente ha respondido de la única forma que quiere: doblando su apuesta. En un tuit publicado esta mañana, Trump ha anunciado que subirá los aranceles al acero y al aluminio canadienses al 50% y ha amenazado con "destruir a la industria del automóvil de Canadá" si el país no renuncia a su soberanía y acepta ser anexionado por EEUU. Pero el presidente se ha dado la vuelta según pasaban las horas y ha dejado en el aire el porcentaje de aranceles que entrarán en vigor mañana por la mañana.

Las bolsas estadounidenses celebraron el retorno de Trump a la Casa Blanca, pero la política económica del magnate, su caótico proteccionismo y sus afirmaciones recientes de que no presta atención a los parqués y de que el país puede necesitar una recesión han hartado a los inversores. Como consecuencia, los parqués han caído, con el Nasdaq 100 registrando su peor sesión desde septiembre de 2022, ante el temor a una desaceleración económica.

EEUU y Canadá tienen, o tenían hasta ahora, dos de las economías más interrelacionadas del mundo. Durante años, los dos países han unido sus cadenas de suministro y complementado sus mercados, de forma que Canadá funcionaba, prácticamente, como un estado más de EEUU en muchos sentidos. Pero todo ha cambiado desde que EEUU eligiera como presidente a Donald Trump, al que esa unión 'de facto' no le parece suficiente y que está decidido a convertir a Canadá en parte del territorio estadounidense por las buenas o por las malas. Pero su principal medida de coacción, una guerra arancelaria, puede volverse en contra de EEUU gracias a esa unión, que se ve especialmente en el mercado energético. Y Canadá ya lo ha advertido, anunciando un recargo especial a la electricidad que vende a EEUU y amenazando incluso con desconectar a su vecino.

Jerome Powell, presidente de la Fed, ha puesto algo de la cordura ansiada por los inversores, fatigados ante la caótica política comercial de Donald Trump. Las bolsas iniciaron la sesión con caídas, profundizando los amplios descensos experimentados ayer después de que el mercado no reaccionara positivamente ante la pausa temporal de parte de los aranceles contra México y Canadá, tal y como hicieron el día anterior con el repliegue de esos mismos impuestos sobre el motor. Sin embargo, las palabras de Powell afirmando que el estado de la economía de EEUU es óptimo y que la Fed está en posición de aguardar más claridad sobre las políticas de Trump, provocaron un giro de 180º en Wall Street, donde las dudas se habían incrementado por los débiles datos de empleo. Sus principales índices han finalizado con subidas, aunque han acumulado caídas del 3% desde el lunes. Ése es el impacto bursátil que han tenido los vaivenes arancelarios de Trump: la tercera semana consecutiva de caídas en Wall Street, donde el parqué ha firmado su mayor caída semanal en lo que llevamos de año.

El caos arancelario en EEUU sigue con un nuevo giro cada día. Donald Trump ha anunciado que firmará una orden para detener los aranceles a México y Canadá hasta el próximo 2 de abril, la fecha en la que planea implantar aranceles generalizados a todo el planeta. En un primer momento solo iba a beneficiar a México como señal de "respeto" a la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, y su "duro trabajo y cooperación" en la frontera, pero poco después ha anunciado que también extenderá la pausa a Canadá, pese a que su Gobierno llamara al primer ministro canadiense, Justin Trudeau, un "cabezahueca".