Redactor de Internacional. Aprendí a cubrir economía en Argentina, aunque mi pasión siempre ha estado en Reino Unido y EEUU, en las que me centro actualmente, porque si algo no son precisamente estos dos países es aburridos. Estudio sobre el bitcoin y el universo de ideas y fraudes que ha crecido alrededor en mis ratos libres.

El tiempo corre para TikTok. Quedan 10 días para que la red social sea prohibida en EEUU, y la firma de origen chino se juega su última carta este viernes: o convencen al Tribunal Supremo para que anulen la ley que ha puesto la espada sobre sus cabezas, o la última acción de Joe Biden como presidente de EEUU será ordenar su prohibición. Una forma de salir de la Casa Blanca por todo lo grande y dejar un problema en el despacho para su sucesor.

Donald Trump ha dado su primera rueda de prensa como presidente electo, y ha dejado claro que sus planes para ampliar el territorio de EEUU no son una broma. El magnate ha dejado sobre la mesa la posibilidad de usar "coerción militar" para conquistar Panamá y Groenlandia por la fuerza si es necesario, alegando que ambos territorios son necesarios para defender la "seguridad nacional" del país; y ha prometido usar la "fuerza económica" para obligar a Canadá a solicitar su acceso a EEUU como otro estado más.

En apenas dos semanas, Elon Musk, el hombre más rico del mundo, será uno de los principales asesores del próximo presidente de EEUU, hasta tal punto que diversos medios y políticos ya le tratan como el 'presidente no electo', con Donald Trump como su 'vicepresidente'. Pero Musk está decidiendo usar su poder para generar el caos: después de poner a EEUU al borde del cierre del Gobierno hace apenas dos semanas, ha decidido saltar al otro lado del Atlántico y animar a que EEUU invada Reino Unido para derrocar al Gobierno laborista salido de las urnas hace apenas 6 meses, en una crisis que amenaza con seguir creciendo.

Como cada final de año, los inversores miran atrás para hacer balance y ver dónde se ha movido de verdad el dinero. Algunas inversiones han dado retornos extraordinarios de forma inesperada, y los que apostaron por ellos pueden celebrarlo por todo lo alto con champán. Otras, por contra, han sido un fracaso mayor de lo que se esperaba. Y, como siempre, hay dos o tres sorpresas que salieron de la nada para dar beneficios disparatados.

¿Puede funcionar un sistema político que requiere de grandes consensos, pero en el que la persona más rica del mundo puede lanzar una jauría de troles a presionar a diputados en directo? EEUU va a intentar responder a esta pregunta este viernes. El país está al borde de sufrir un cierre del Gobierno, porque esta misma noche caducan los presupuestos anteriores, y los dos partidos están negociando contrarreloj un acuerdo de mínimos para prorrogarlos tres meses más. El problema es que la polarización actual, y el sorprendente ascenso de Elon Musk, están haciendo cada vez más difícil llegar a los acuerdos bipartidistas que exige el sistema estadounidense.

Beth Hammack pudo haber sido la directora financiera de Goldman Sachs y convertirse en la mujer más poderosa de la banca estadounidense. Pero perdió aquel tren en 2021, y en su lugar se ha convertido en el último fichaje de la Reserva Federal. Y, en su segunda reunión, ha decidido convertirse en la 'halcón rebelde' que disiente de la bajada de tipos aprobada ayer, dejando clara su posición nada más llegar.

Queda casi un mes exacto para que Donald Trump tome posesión como presidente, y EEUU ya está reviviendo los meses de caos político de su anterior presidencia. Este jueves, demócratas y republicanos iban a votar una prórroga de los presupuestos durante tres meses para poder irse de vacaciones de Navidad en paz y dejar margen para que el próximo Gobierno negocie las Cuentas del próximo año en febrero, cuando eche a andar. Pero el 'copresidente electo', Elon Musk, ha decidido que el país se merece una buena crisis política como regalo de Papá Noel y ha ordenado a los diputados republicanos votar no a la prórroga, abocando al país a un nuevo cierre del Gobierno.

Las guerras comerciales de EEUU son el cuento de nunca acabar. Hace mucho tiempo, en las tierras del lejano Oriente apareció un dragón asiático con un enorme apetito, apetito por el comercio internacional. El dragón no paraba de acumular superávit comercial y EEUU vio amenazado su reino mercantil. El caballero que tenía que luchar contra el dragón asiático no era Donald Trump. Se llamaba Ronald Reagan y la época, los mediados de los ochenta. A aquel presidente, que hizo de vaquero en más de una película, no le quedó más remedio que desenfundar sus armas en una guerra comercial contra Japón.

Los principales índices estadounidenses han cerrado con fuertes descensos después de que la Reserva Federal haya optado por volver a bajar los tipos de interés en 25 puntos básicos. Los mercados se han quedado helados después de ver que el gráfico de puntos de la autoridad monetaria prevé dos menguas más para 2025, lo que supone la mitad de lo estimado en septiembre, mes en el que aplicó el recorte jumbo. En este contexto, el Dow Jones ha perdido más de mil puntos, firmando su peor racha desde 1974. En términos generales, es la peor reacción a una decisión de la Fed desde marzo del año pasado.

Tal y como se esperaba, la Reserva Federal ha recortado los tipos de interés una vez más, hasta el rango del 4,25%-4,50%. En el comunicado, el banco central explica que "la perspectiva económica es incierta", y que están atentos a "los dos lados del mandato", alertando de un repunte en la inflación en 2025.