
Redactor de elEconomista
La firma, dedicada a la gestión automatizada de inversiones, asesorará uno de los planes de empleo que gestiona Caser Pensiones. El plan estará invertido en distintos fondos cotizados (ETFS) de renta variable y renta fija, y tendrá "un modelo de gestión similar al de los planes de pensiones individuales de Indexa", explica la firma.
El mercado tiene su confianza depositada en los estímulos que esperan que lance el Banco Central Europeo (BCE) la semana que viene. Con los bonos en mínimos históricos de rentabilidad, y el posicionamiento de los inversores, el organismo sólo puede defraudar la semana que viene.
La fiesta que se ha vivido en el mercado de renta fija durante los últimos años no ha sido un guateque cualquiera. En 2019, especialmente, los inversores en activos de deuda salieron con la intención de tomar una copa, con más miedo que vergüenza, y terminaron en una bacanal que seguramente recordarán durante muchos años. El problema ahora es que tras la fiesta y los excesos que se han vivido en el mercado de bonos, especialmente durante el último año, parece imposible que no llegue la resaca, que todavía no se ha producido en los principales índices de deuda que monitoriza Bloomberg.
La última semana está siendo fatídica para la economía Argentina y para los inversores en el país. Después de conocerse los resultados de las elecciones primarias el pasado 11 de agosto, la desconfianza que han generado en los mercados las perspectivas políticas, y el fracaso del ejecutivo de Mauricio Macri de colocar deuda a corto plazo en los mercados, ha terminado desembocando esta semana en una petición al Fondo Monetario Internacional (FMI) para que renegocie los plazos de la deuda que tiene que pagar el estado.
El mercado reacciona vendiendo los bonos a 30 años, los de más largo plazo del país