Redactor de elEconomista

Después de confirmar un nuevo aumento de producción de petróleo este sábado, que alcanzará los 548.000 barriles diarios a partir del 1 de agosto, la OPEP+ (el cártel que recoge a la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus socios externos) tiene claro que el aumento de oferta está llegando a su fin. Miembros del cártel han reconocido a la agencia Bloomberg que ya hay un plan sobre la mesa para aumentar, por última vez este año, la producción de crudo, en 550.000 barriles en el mes de septiembre, pero que después de este movimiento se paralizará el proceso de aumento de producción.

Las actas de la reunión del 17 y 18 de junio arrojan luz sobre el debate que tuvieron los miembros del Comité Federal del Mercado Abierto, un encuentro que reflejó una falta de consenso cada vez más grande en el seno del organismo. En él, los directivos apuntaron a la creciente posibilidad de que su peor escenario se haga realidad: que los aranceles impulsen la inflación a la vez que las deportaciones de trabajadores creen un agujero en el mercado laboral.

En EEUU, tener un coche es prácticamente una obligación para todos sus habitantes, y eso hace que los indicadores económicos relacionados con ellos sean una señal muy clara de qué está pasando en el país. Y las cifras de este miércoles han vuelto a disparar las alertas: el índice de precios de los coches usados, que ya predijo la crisis inflacionaria tras la pandemia, ha vuelto a repuntar con fuerza por culpa de los aranceles de Donald Trump.

Por primera vez en la historia, una empresa ha batido la barrera de los 4 billones de dólares en capitalización bursátil. Nvidia, el fabricante de chips estadounidense, consigue un nuevo récord nunca visto, tras recuperarse de un muy nefasto inicio de año para su cotización por la irrupción de DeepSeek y el impacto de la guerra arancelaria. La firma ya sube un 22% en lo que va de año y más de un 1.000% desde el arranque de 2023. El efecto DeepSeek se ha diluido, y la expectativa de una fuerte demanda para sus chips sigue espoleando la cotización de la firma.

El cacao se ha convertido en uno de los principales protagonistas en el mercado de materias primas en los últimos años. El precio del grano se ha disparado desde principios de 2023, y especialmente a partir de 2024, cuando el precio llegó a superar, por primera vez en la historia, los 10.000 dólares por tonelada. A finales del año marcó máximos históricos, en 12.565 dólares, y desde entonces su precio se ha moderado con fuerza. En los últimos meses, la promesa de una mejora en las condiciones climatológicas para las principales cosechas del mundo, en Ghana y Costa de Marfil, ha contribuido a corregir parte de las subidas, y 2025 está siendo especialmente destacable en este sentido. El cacao es la segunda materia prima que más se abarata en el conjunto del ejercicio, y ya cae un 24,97% en el año. Sin embargo, los mercados siguen comprando cacao a precios desorbitados si se compara con los del pasado: ahora, se paga a 8.760 dólares por tonelada.

El productor español de acero inoxidable, Acerinox, se está planteando seguir los pasos de Ferrovial, y valora dar el salto a la bolsa estadounidense en los próximos años con el objetivo de ampliar su base inversora para una compañía que, igual que la firma de infraestructuras, tiene el grueso de su negocio en Estados Unidos. "Somos una compañía americana con una base inversora europea", explicó en abril Carlos Ortega, presidente de Acerinox. Ahora, Bernardo Velázquez, CEO de la firma, ha confirmado en una entrevista concedida a la agencia Bloomberg que la firma no descarta empezar a cotizar en el mercado estadounidense. Eso sí, la operación tendría que esperar a consolidar Haynes International, la compañía estadounidense que adquirió Acerinox a finales del año pasado.

La economía rusa está sufriendo en 2025, y parece que los problemas se han contagiado a la industria petrolera del país. Para una nación que depende enormemente de sus ingresos por la venta del petróleo, y más ahora, que tiene que financiar una guerra, es de vital importancia producir la mayor cantidad de crudo posible. Históricamente Rusia ha sido uno de los países que ha incumplido sus acuerdos con la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), y ha sido habitual que produjese más de lo que reconocía abiertamente, pero ahora, de forma sorprendente, Rusia está produciendo menos cantidad de la que se había comprometido.

La Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus socios externos, el cártel conocido como OPEP+, parece haber tomado la decisión de repetir el incremento de oferta de crudo que se ha llevado a cabo en mayo, junio y julio: 411.000 barriles más de producción que llegarán a un mercado que, ya de por sí, está bien abastecido. El aumento de oferta ha generado una reacción en el mercado, y el barril Brent europeo ha borrado todas las subidas que experimentaba el viernes. Si la OPEP+ continúa aumentando la oferta a este ritmo habrá alcanzado el objetivo que se marcó en diciembre de 2024 un año antes de lo previsto.

La bolsa estadounidense ha vuelto a marcar máximos, superando este viernes los niveles históricos que se alcanzaron en febrero. La recuperación de Wall Street ha sido muy rápida en las últimas semanas, y el rebote ha vuelto a dejar a los principales índices estadounidenses en niveles preocupantes para algunos analistas. Es el caso de Michael Hartnett, estratega jefe de Bank of America, quien cree que la bolsa norteamericana corre el riesgo de entrar en territorio de burbuja, después de una entrada de capital masiva en 2025. Hartnett asegura que los inversores están tratando de aprovechar el recorte de los tipos de interés por parte de la Fed en los próximos meses, y advierte del peligro de disparar en exceso a Wall Street durante la segunda mitad del año.

El periódico 'Israel Hayom', el más leído del país, ha publicado una información firmada por Ariel Kahaba, corresponsal diplomático del diario, en el que aseguran que Donald Trump y Benjamin Netanyahu han cerrado esta semana un acuerdo para acabar con la guerra de Gaza en dos semanas. Según las informaciones publicadas, el pacto pretende que la Franja se quede en manos de cuatro países árabes, que sustituirán a Hamás como Gobierno en la zona. Entre otras cosas, en el mismo acuerdo se recoge una expansión de los 'Acuerdos Abraham', que implicarían que Siria, Arabia Saudí, y otros países musulmanes del mundo reconozcan a Israel y establezcan relaciones diplomáticas oficiales. Este hipotético pacto, de llevarse a cabo, terminará con uno de los focos de tensiones geopolíticas más importantes que existen en este momento para los mercados.