Correlación no implica causalidad. Vicente Nieves lleva buscando explicaciones a los movimientos de los mercados y de la economía desde la crisis financiera de 2007. Aún no tiene la respuesta.
POLÍTICA MONETARIA

El Banco Central Europeo (BCE) ha rebajado los tres tipos de interés clave en 25 puntos básicos, cumpliendo con el guion que había ido desvelando en los últimos meses. Esta es la primera rebaja del tipo principal desde 2016 (ocho años) y la primera rebaja de la tasa de depósito desde 2019 (cinco años). De este modo, el tipo interés de la tasa de depósito (donde los bancos aparcan su liquidez) se reduce hasta el 3,75%, mientras que el tipo principal de refinanciación (el tipo que se cobra a los bancos en las subastas semanales) cae al 4,25% y el tipo sobre la facilidad marginal de crédito (la ventanilla de emergencia) queda en el 4,5%, según reza el comunicado. Además, el BCE ha elevado la previsión de crecimiento en tres décimas, hasta el 0,9%, para 2024, y la inflación en dos décimas, hasta el 2,5% para este año.

La flota fantasma de Rusia (buques petroleros opacos que transportan el crudo 'prohibido' ruso) está operando una vez más frente a las costas de España, aprovechando un 'punto oscuro' entre el territorio español y el de Marruecos para realizar sus operaciones de trasvase de hidrocarburos. Aunque es cierto que España aprobó hace unos meses un nuevo Reglamento de Ordenación de la Navegación Marítima que fuerza a todos los barcos que transporten sustancias contaminantes a avisar a la capitanía marítima correspondiente (en este caso sería la de Melilla) si quieren fondear en el espacio marítimo nacional, la flota fantasma de Rusia estaría esquivando esta obligación aprovechando lo difuso de las 'fronteras marítimas' y la tensión existente entre España y Marruecos en la zona.

La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), liderada por Arabia Saudí, parece haber cedido ante las crecientes demandas de un grupo de rebeldes dentro del cártel que estaban 'locos' por aumentar la producción. Estos rebeldes llevaban tiempo invirtiendo y trabajando para incrementar su producción potencial de crudo lo máximo posible. Sin embargo, estas inversiones millonarias se estaban topando con un muro casi infranqueable: los recortes de la OPEP. Ahora que los recortes comienzan a deshacerse, el petróleo que volverá fluir hacia los mercados se unirá a la creciente marea de crudo de los países ajenos al cártel que llevan años incrementando su producción. Algunos expertos ya prevén un importante exceso de oferta para la segunda mitad del año si la OPEP, finalmente, cumple con su hoja de ruta: mantenemos los recortes ahora para abrir las compuertas en octubre.

Inmobiliario

El inmobiliario es un mercado un tanto peculiar. Por un lado, la vivienda es considerada popularmente como un derecho fundamental (algo incompatible con el mercado). Pero lo cierto es que también es un bien de mercado (se consume) o incluso un activo de inversión (hay quien compra vivienda para canalizar y diversificar su ahorro). De modo que, como sucede con otros bienes, cuando la oferta es amplia, en relación con la demanda, su precio tiende a ser relativamente bajo y cuando su oferta es reducida (en relación con la demanda) su precio tiende a subir, reduciendo su asequibilidad y complicando la vida a los hogares.

China está acumulando materias primas en grandes cantidades. Los traders que operan a diario con oro, petróleo, plata o cobre aseguran que las compras por parte del 'gigante asiático' son inusualmente elevadas, sobre todo si se tiene en cuenta que su economía está perdiendo impulso y que su sector inmobiliario (un gran consumidor de metales) se encuentra prácticamente congelado. De modo que la gran pregunta para la que nadie tiene una sola respuesta es, ¿por qué Pekín está acaparando tal cantidad de materias primas?

Una vez más ha quedado en evidencia que la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) tiene ciertos problemas para controlar el precio del petróleo en un mercado cada vez más diversificado. La reunión de este fin de semana tenía como objetivo dar una imagen de solidez, prolongando los recortes y mostrando unanimidad. Finalmente, lo que ha sucedido es que el petróleo crudo se ha hundido más de un 4% y ha caído por el abismo 'técnico'. En los detalles de la reunión de la OPEP se ocultaban algunos mensajes que no terminaron de convencer al mercado, como es la reversión de los recortes voluntarios (una parte de los recortes) a partir de octubre de este año. El Brent ha llegado a perder incluso 77 dólares y el West Texas también ha cotizado incluso por debajo de los 73 dólares el barril, niveles que rozan los mínimos de este año.

Un indicador muy observado sobre la actividad empresarial en las economías desarrolladas, sobre todo las europeas, pero no tanto sobre la economía más allá de sus fronteras acaba de conformar una dolorosa realidad para el flanco Occidental: las sanciones internacionales a raíz de la guerra en Ucrania no han doblegado a la economía de Rusia. Los índices de gestores de compras, una encuesta que S&P Global elabora a los gerentes encargados de las compras en empresas tanto del sector manufacturero como del de servicios, los famosos PMI, han arrojado en mayo unas lecturas en Rusia que confirman que el músculo económico ruso sigue fuerte mientras la economía de EEUU empieza a mostrar los primeros signos de debilidad y la europea empieza a remontar muy tímidamente.

Las estadísticas hay que cogerlas muchas veces con pinzas porque de forma aislada no siempre reflejan la realidad. Este es el caso del PIB per cápita, el indicador más utilizado para comparar el nivel de desarrollo ('riqueza' hablando vulgarmente) de la población entre países. Atendiendo a este indicador, hace 20 años había un país en África que era más rico que España (otra historia bien diferente es cómo estaba distribuida esa riqueza) y que la mayoría de países del sur de Europa gracias a sus recursos naturales. El petróleo convirtió a Guinea Ecuatorial en la economía con mayor renta per cápita de África con diferencia. Sin embargo, una gestión deficiente, tanto de la industria como de los beneficios que generaba, junto al agotamiento (maduración en el argot petrolero) de los yacimientos del país, están llevando esta antigua colonia de España a sufrir una recesión económica que no parece tener fin. De los últimos 12 años, el PIB ha caído en diez de ellos. Esta es la historia del auge y caída de Guinea Ecuatorial.

El renacimiento de la energía nuclear es un hecho. El impacto de la bomba atómica y los desastres nucleares han puesto freno durante muchos años a la expansión de esta energía tan 'eficiente'. Tras décadas de muy mala prensa, críticas despiadadas y planes para reducir el peso de la nuclear en el mix energético, la inversión para relanzar este tipo de fuente de energía está comenzando a despuntar con fuerza. Este cambio de postura de muchos países es el resultado del nuevo entorno geopolítico y de la realidad energética a la que se enfrenta el mundo. La guerra de Ucrania y el propio avance de las energías renovables (aunque parezca contradictorio esto último) han demostrado que la independencia energética y la transición hacia un modelo sostenible resulta imposible, hoy en día, sin una energía estable y parcialmente limpia como la nuclear.

Hasta aquí lo fácil. El Banco Central Europeo (BCE) se comprometió hace unas semanas a bajar los tipos de interés en junio ante la potente desinflación que se ha presenciado en la eurozona y así lo hará la semana que viene. Pero esta bajada de tipos será como un espejismo o 'trampa' que pondrá la 'miel en los labios' de quien espera un alivio financiero contundente. Tras este movimiento, el BCE se enfrenta a un abismo que da vértigo. La desinflación ha sido rápida y potente, pero se ha atascado mucho antes de lo que el BCE habría querido, y confirma el mantra de que el último esfuerzo para alcanzar el objetivo del 2% es el más duro. Para colmo, los salarios han vuelto a repuntar con fuerza en el último dato publicado y la economía de la zona euro parece despertar impulsada por el consumo y la inversión. ¿Qué hay en el horizonte que se ve más allá de junio? Los miembros del BCE lo tienen claro: "Incertidumbre máxima".