Bien lo sabe la Unión Europea (UE), la recuperación económica de sus Estados miembros pasa por apostar decididamente por las transiciones ecológica y digital. Solo de esta manera se puede alcanzar el objetivo de ser más sostenibles y resilientes. Así, tal y como acordaron los dirigentes de la UE en julio, el plan de recuperación denominado Next Generation EU movilizará 750.000 millones de euros que no solo irán destinados a impulsar la inversión privada y proteger a las empresas en dificultades, sino que apoyarán con especial atención aquellos programas que aceleren esta doble transición.