Todos hemos contado los días que faltan para que Trump se sentara en la Casa Blanca. Como si del lanzamiento de una misión espacial se tratara, la cuenta atrás ha disparado nuestras pulsaciones. La expectación está siendo enorme. Ahora bien, también lo es la incertidumbre, ya que nadie conoce cuál será ni la trayectoria ni el destino final de la nave.

Director de Riesgo País y Gestión de Deuda de Cesce