Tres semanas le ha durado el programa al humorista en una de las franjas más competitivas de la parrilla, tres días desde que llegaran sus rivales, Pablo Motos y David Broncano. El Hormiguero y La Revuelta comenzaron la temporada el pasado lunes y abocaron a un flojísimo Babylon Show al fracaso. El programa de Carlos Latre ni siquiera había despegado y se movía entre el 3 y 6 % de share, un dato inaceptable para Mediaset. La cadena ha fulminado el formato este miércoles y Carlos Latre se ha despedido de su pequeña audiencia con una sonrisa y una pullita (o unas cuantas) para la competencia: "Yo no hago guerras".