Un mensaje el pasado viernes durante el homenaje que Telecinco preparó para María Teresa pudo cambiar el rumbo entre Carmen Borrego y su hijo, José María Almoguera. El nieto de la periodista sorprendió en directo para hablar de su abuela y, aunque no saludó directamente a su madre por los conflictos familiares, sí le dejó después un mensaje por privado. Un mensaje que no solo fue muy bien recibido por Carmen, sino también por el resto de la familia. "Es un gran paso en su relación", celebró este lunes Alejandra Rubio.
Este martes, en Vamos a ver, Borrego ha hablado de cómo avanza la relación con su hijo: "La esperanza [de la reconciliación] no la he perdido nunca. Creo que fue un paso positivo, aunque se equivocara al no saludarme. No quiso tener una conversación pública y lo apoyo, no era el momento. Lo llamaron para hablar de su abuela y él sabía que [Terelu y yo] estábamos en el plató".
En este sentido, Carmen sostiene: "Los acercamientos tienen que ser privados y esta la única manera de que esto llegue a buen puerto. Siempre he defendido que era anónimo, porque él lo quería, ahora ha cambiado de opinión y todo el mundo es libre de hablar", ha dicho en referencia al cambio de José María, que ahora posa en los photocalls y podría acabar sentado en un plató de televisión.
Sobre la llamada de su hijo a ¡De Viernes!, ha dicho también: "Yo no esperaba esa llamada": "Yo entré en shock. Me hubiera gustado que me saludara, por supuesto, pero en ese momento mi reacción es inmediata. A mí lo que me hace cambiar de opinión es el mensaje que él me manda", ha sentenciado al respecto.
Por otro lado, sobre el motivo por el que José María no acudió a la última misa que se celebró recientemente en Málaga por el primer año sin María Teresa, ha dicho: "El día 2 él estaba en Madrid y no en Málaga. Con su entrada al programa nos mandó un mensaje: que todo el mundo sepa que su abuela fue muy importante para él".
Y sobre la reconciliación que tanto sueña y espera, piensa que la familia también juega un papel muy importante: "Si tienes un problema conmigo, lo tiene conmigo. [En este sentido], no entendía por qué lo tenía con la familia. Pensé que pudiera ser por miedo a la reacción, pero esto no hubiera ocurrido porque yo lo he pedido. Yo creo que el acercamiento es a través de la familia y espero que el último eslabón sea su madre. Lo espero ansiosamente".