Director ejecutivo de Strategy Economics
Matthew Lynn

Las fábricas de coches están inactivas porque en la Europa continental rechazan las exportaciones de Jaguars y Land Rovers. Los financieros de la City de Londres se reconvierten en camareros mientras el sector traslada el comercio mayorista a Fráncfort y París.

Matthew Lynn

Al final, no fue exactamente otro 2008. No hubo colas en los bancos de Hanover o Dusseldorf para retirar los ahorros de toda una vida ni momento Lehman con banqueros molestos y desconcertados de patitas en las calles de Frankfurt. Aun así, el tambaleo del sistema bancario alemán de este mes, centrado en especial en la estabilidad del poderoso Deutsche Bank, no deja de ser preocupante para la eurozona. Ahora parece que a la moneda única le costaría mucho sobrevivir a otra crisis bancaria.

Análisis

¿Cuál será la próxima gran crisis financiera? ¿El estallido de la burbuja de las acciones tecnológicas que se ha ido hinchando en los dos últimos años? ¿El desplome generalizado del mercado bursátil, más allá de la liquidación que ha marcado el inicio de 2016? Podría ser, aunque cada vez más parece que serán las bancarrotas nacionales causadas por el declive de los precios del petróleo y las materias primas.

Mathew Lynn

¿Cuál será la próxima gran crisis financiera? ¿El estallido de la burbuja de las acciones tecnológicas que se ha ido hinchando en los dos últimos años? ¿El desplome generalizado del mercado bursátil, más allá de la liquidación que ha marcado el inicio de 2016? Podría ser, aunque cada vez más parece que serán las bancarrotas nacionales causadas por el declive de los precios del petróleo y las materias primas.

Matthew Lynn

Tecnología punta. Rabiosamente ambiciosa y agresivamente expansionista. Y su nombre también empieza con a. Por muchas razones, cuesta distinguir entre Apple y Alphabet, como ahora se hace llamar Google. Que una de ellas se convierta en la mayor empresa del mundo y supere a la otra debe de ser tan importante como cambiar de tono de calcetines. A nadie le interesa mucho.

Matthew Lynn

Una guerra comercial entre las dos mayores economías del mundo que haría parecer a los años treinta como una edad de oro. Un bloqueo que impediría a las empresas abandonar el país. Una tasa máxima del impuesto de la renta del 52%, mayor que en Francia. A juzgar por las políticas sobre la mesa, podríamos pensar que hablamos de Corea del Norte o aún Venezuela. Sin embargo, hablamos de Estados Unidos.

Matthew Lynn

Una tasa de crecimiento anual del 6,9%. Un crecimiento de ventas minoristas de más del 8 por ciento y online por encima del 25% anual. Son la clase de cifras del auge económico por el que casi cualquier banquero central, presidente y primer ministro mataría. Si no fuese porque son los últimos datos de China y porque suponen el índice más bajo anual de crecimiento del PIB desde allá por 1990, no habría caído como un chorro de agua fría.

Análisis

Un billón, dos billones? Algunas estimaciones sitúan el valor potencial de Saudi Aramco hasta en diez billones de dólares. Por ahora, es difícil concretar el valor de este gigante del petróleo de Arabia Saudita si sigue adelante su oferta pública inicial (OPI). De lo que no cabe duda es que será probablemente la compañía más cotizada del mundo, que eclipsaría incluso a Apple.

Matthew Lynn

Un billón, dos billones... Algunas estimaciones sitúan el valor potencial de Saudi Aramco hasta en diez billones de dólares. Por ahora, es difícil concretar el valor de este gigante del petróleo de Arabia Saudita si sigue adelante su oferta pública inicial (OPI). De lo que no cabe duda es que será probablemente la compañía más cotizada del mundo, que eclipsaría incluso a Apple.

Análisis

Un vehículo de última generación recoge a los niños del colegio y los lleva a casa mientras usted termina unos asuntos en la oficina. Una flota de furgonetas controladas por ordenador entrega paquetes en su casa. Los directivos se sientan cómodamente y leen los correos mientras un microchip los lleva de reunión en reunión. No hemos llegado aún al punto de inflexión en que los coches sin conductor se convertirán en algo normal, pero nos acercamos lo bastante como para que los fabricantes tradicionales empiecen a parecer preocupados y se pongan a buscar respuestas.