La extrema derecha de Marine Le Pen arrasa en Francia y también en Alemania, dado que los ultras son la segunda fuerza en la primera economía europea. La coalición Unión Demócrata Cristiana (CDU) fue la opción más votada en las elecciones al Parlamento Europeo en Alemania (29,5%), según unos resultados que sitúan a la ultraderechista Alternativa por Alemania (AfD) como segunda fuerza política, con un 16,4%, lo que supone un importante ascenso con respecto al 11% de hace cinco años.