Los países del euro esquivan por los pelos la recesión en 2023. Tras un tercer trimestre en el que el Producto Interior Bruto (PIB) de la eurozona se contrajo un 0,1%, la economía de los Veinte cerró el ejercicio con un crecimiento en plano y evita, así, entrar en recesión técnica, cuando se enlazan dos trimestres consecutivos de crecimiento negativo.