Las sequías se presentan como uno de los principales problemas a los que hacer frente, hasta tal punto que la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación (UNCCD, por sus siglas en inglés) no ha dudado en afirmar que se trata de "una emergencia sin precedentes a escala planetaria" y que su impacto apenas está empezando a manifestarse. Y los datos avalan el alarmismo, los periodos de sequía han aumentado un 29% desde el año 2000.