Se habla de movilidad sostenible con la boca llena por parte de algunos, pero obviando la mitad de las fases que inexorablemente atraviesa la gestión de los activos que harían posible una logística de bienes sostenible, segura y conectada. Hoy en día la movilidad es solo una parte de nuestra conectividad. A pesar de que la transformación cultural que requiere esta transición está en marcha, como no seamos lo rigurosos y honestos que debemos, no se alcanzará la excelencia en la gestión. Y no habrá sido por falta de conocimiento y voluntad de nuestros profesionales de la administración pública y del sector privado, altamente demandados fuera de nuestro país, así como de las herramientas tecnológicas de que disponemos.