Cuando se habla de Paul McCartney, es imposible no invocar al mismo tiempo el nombre de John Lennon. La dupla que formaron en los Beatles dio lugar a algunas de las mayores obras maestras de la música popular, marcando un antes y un después en la cultura del siglo XX. Pero el misterio de su colaboración –esa alquimia creativa que transformaba ideas en himnos eternos– sigue siendo difícil de descifrar. McCartney, único sobreviviente de esa mítica sociedad musical, no intenta desvelarlo del todo. “Es como los trucos de los magos”, ha dicho alguna vez.