Crítica literaria
15/12/2023, 18:47
Fri, 15 Dec 2023 18:47:01 +0100
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Sentada entre árboles y pinos en un ambiente con olor al verde del campo, me dispuse a leer el emblemático Premio Planeta concedido a Sonsoles Ónega con Las hijas de la criada. Emblemático por el prestigio del que goza, pero cada día más mermado hacia la desconfianza de quienes posibilitan su actividad. Sorprende el modo en que el jurado ha premiado una novela que, sin duda, no goza de la calidad imperante de la narrativa literaria. No culpo a su escritora. Posiblemente, Ónega ha plasmado su conocimiento humanístico en el papel de las casi 500 páginas que ocupa el relato. Un conocimiento nada en vano y cargado de experiencia. No dudo que Sonsoles se merezca un Premio Planeta. Pero desde luego no con Las hijas de la criada. Quizás el galardón se deba a un exhaustivo reconocimiento por su figura y aportación a la disciplina escrita. Se lo merece por haber fraguado una trayectoria cargada de esfuerzo. Pero Las hijas de la criada dejó una sensación agridulce en mi imaginario.