Bradley Cooper, uno de los actores más reconocidos de la industria cinematográfica de Hollywood, sorprendió a la población americana con su participación en un evento benéfico para los "neoyorquinos necesitados". La estrella de Maestro, vestido con un delantal y como un auténtico chef, sirvió diversos philly cheesesteaks en West Village desde una furgoneta gastronómica para recaudar fondos económicos destinados a los más necesitados.
El evento tuvo lugar el pasado miércoles como una altruista iniciativa. Desde un camión de comida, estacionado cerca de la Sexta Avenida y bajo la denominación de Danny & Coop's Cheesesteaks, el ex de Irina Shayk prestó sus servicios ocultos de chef para sumarse a esta bonita causa.
El actor dejó sin palabras a los neoyorquinos, mientras servía cheesesteaks a un precio de 10 dólares. En compañía de la sobrina de Danny DiGiampietro -dueño y propietario del negocio- y el gerente Seth Braunstein, el actor asistía a una fila que replegaba las calles de Manhattan. El público no disfrutó de una delicia gastronómica icónica en la cultura americana, además pudo presenciar en carne y hueso al mítico Cooper, y a personalidades como la actriz Laura Dern y la modelo Gigi Hadid.
La totalidad de las ganancias fueron destinadas a una organización sin ánimo de lucro para asistir a todo aquel que precisara de alimento en estas fechas tan señaladas. Sin embargo, la novedad del evento no fue solo la asistencia de Cooper: el actor estaría planeando la apertura de una sucursal de cheesesteaks en Nueva York junto a DiGiampietro.
La relación entre ambos se remonta a finales de 2019, cuando meses después de la apertura de Angelo's en Ninth Street (Philadelphia), se reencontraron en el mostrador del negocio, tras un partido de los Eagles. El actor elogió al propio DiGiampietro por los extraordinarios sándwiches que preparaban en su local, y es entonces cuando empezó la posible relación profesional.