La guerra del depósito está abierta entre entidades. En un contexto marcado por las bajadas de tipos de interés por parte del BCE, los bancos mueven ficha para captar la liquidez de los ahorradores. En julio hemos visto cómo varias entidades subían la remuneración y los mejores depósitos ofrecen rentabilidades por encima del 2% TAE. Los depósitos son una buena opción para poner a trabajar el ahorro. Ofrecen un interés fijo, lo que se traduce en una ganancia estable y predecible, a diferencia de la inversión en bolsa y en renta fija. Implican, eso sí, que el cliente no puede tocar el dinero durante un periodo estipulado (que puede ser de un año, dos, tres, o incluso plazos más pequeños). Si se retira el dinero antes del vencimiento, lo más habitual es que se pierdan todos o una parte de los intereses generados.