
La buena cocina, la casera, es una parte fundamental en nuestra dieta por lo que buscar ingredientes de buena calidad es fundamental. Ante la subida de precios en la cesta de la compra es frecuente que cada vez la gente recurra a más pequeños trucos para ahorrar. ¿Qué mejor que producir tu propia comida?
Es cierto que no todos cuentan con un terreno amplio para plantar y tener grandes cosechas, pero hay pequeñas plantas que todos pueden tener en su casa y, si se tiene algo de mano, pueden dar frutos deliciosos.
La albahaca: fresca y lista
Una planta perfecta para cualquier jardín o incluso alféizar de la ventana. Es fácil de cuidar y tiene un sabor y aroma que ahuyenta a plagas comunes, la compañera ideal. Además, no es tóxica para los gatos, aunque si se la come ya no hay nada más que hacer.
Para que la albahaca esté activa durante más tiempo hay que cosecharla, ya que cortar periódicamente las hojas o los tallos de la albahaca la estimula a generar nuevos brotes.
Hay tiempos específicos para cosecharla, y estos son cuando haya alcanzado entre los 15 y 20 cm de altura y tenga al menos cuatro pares de hojas. La directora de educación comunitaria de la Sociedad Hortícola de Pensilvania, Sally McCabe, afirma que: "También puede cosecharla durante la temporada de crecimiento, idealmente antes de que la planta florezca".
Si por el contrario ya ha florecido se sigue pudiendo cosechar, pero el sabor de sus hojas será algo amargo.
Cómo cosecharla
Quitarle las hojas es un buen método si solo se necesitan unas pocas hojas. Para ello corta con cuidado cada hoja en la unión del tallo con la rama principal. "Empiece por las hojas superiores y vaya bajando para fomentar un crecimiento más frondoso", dice McCabe.
Esta es una forma, pero si se quiere mayor productividad. "Para obtener tallos completos, use tijeras de podar afiladas o tijeras de podar para cortar justo por encima del nudo de la hoja (la protuberancia donde crece una hoja nueva). Esto también estimulará el crecimiento en ese punto", explica.
Conservarlas
Si solo se va a cosechar las hojas bastará con envolverlas en un paño húmedo y una bolsa hermética en la nevera. Si se hace con tallos se pueden colocar sobre un vaso con agua como si fueran flores.
Una alternativa es congelarlas como cubitos. Llena la cubitera con agua pon la hoja y guárdala en una bolsa hermética en el congelador.
Para secar las hojas de albahaca, cuelgue las ramas boca abajo y guárdelas en un recipiente hermético una vez secas.
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