
LaLiga se cae de las estrellas con el fin del mercado de fichajes de verano. Todos los clubes de fútbol han salido de compras para renovar sus plantillas; pero los equipos españoles, que no hace mucho ocupaban el podium entre los que más invertían, se quedan ahora a la cola entre las grandes competiciones a nivel mundial.
En concreto, LaLiga ha invertido en esta campaña de verano solo 424,15 millones de euros, de los que 103 millones corresponden además al fichaje de Jude Bellingham por el Real Madrid.
Ocupa así la sexta plaza entre los que más invierten, por detrás de la Premier inglesa, que ha destinado una cifra récord de 2.811,2 millones de euros a la incorporación de jugadores, siete veces más que la española; y lejos también de la liga francesa, que se ha gastado 898,64 millones, de la saudí, que con 896,57 millones se cuela por primera vez entre las grandes; de la italiana, con 854,46 millones y de la Bundesliga, con 748,05 millones de euros.

Una prueba clara de los cambios que se están produciendo en el mundo del fútbol y del poderío de los clubes ingleses y saudíes es que mientras que LaLiga ha invertido este año un 20% menos, la Premier se ha gastado un 25% más y la competición árabe ha multiplicado por 24 el importe destinado a fichajes.
LaLiga, de hecho, ha sido criticada por haberse convertido una competición low cost durante este periodo estival debido no solo a los pocos fichajes, sino también a la salida de muchos jugadores, como Karim Benzema del Real Madrid o Dembelé y Sergio Busquets del FC Barcelona.
El Real Madrid, a la cabeza
El club que más se ha gastado con mucha diferencia ha sido el Real Madrid, que debido fundamentalmente al fichaje de Bellingham al Borussia de Dormunt, ha invertido un total de 129,5 millones de euros. Lo que llama la atención es que el segundo club que más se ha gastado ha sido la Unión Deportiva Almería, que con un presupuesto mucho más bajo, ha destinado un total de 52 millones al fichaje de futbolistas como César Montes, procedente del RCDEspanyol; Luis Suárez, del Olympique de Marsella o Ibrahima Koné, del FCLorient.
Muy por detrás ya quedan el Atlético de Madrid, que se ha gastado solo 33,7 millones de euros; el Sevilla, que ha invertido 32 o el Celta de Vigo con 25 millones. Una de la razones más destacadas que explican la caída en el gasto de los clubes españoles radica en las dificultades financieras que atraviesa el FC Barcelona, que este año se ha gastado solo 3,4 millones en la incorporación de Oriol Romeu, procedente del Girona. Y es que Gündogan e Iñigo Martínez han llegado libres y tanto Joâo Cancelo como Joâo Félix han llegado cedidos desde el Manchester City y el Atlético de Madrid.
La Premier golea
Más allá así de lo que pase en los terrenos de juego, el líder destacado del fútbol mundial es la Premier. En Inglaterra, solo el Chelsea se ha gastado 464,1 millones de euros, un 9% más que toda la liga española junta. Pero es que el Tottenham Hotspur se ha gastado 248,6 millones, el Manchester City 241,1 millones, el Arsenal 234,9 millones y el Manchester United 206,7 millones de euros. Destacan especialmente los 116 millones que se ha gastado el Chelsea en Moisés Caicedo o la misma cantidad que se ha gastado el Arsenal en Declan Rice, lo que le convirtió en el futbolista inglés más caro de la historia. En el mercado de fichajes, la competición inglesa nunca había tenido hasta ahora un competidor directo, pero la Saudi Pro League le hace ya frente tras sacar todo su arsenal.
El crecimiento saudí
En Arabia Saudí todavía faltan dos semanas para que cierre su mercado y tienen tiempo para hacer más fichajes, pero son muchos ya los jugadores consagrados en el Viejo Continente que han hecho las maletas. Cristiano Ronaldo fue el primero de las grandes estrellas el pasado mes de diciembre tras rescindir su contrato con el United y, después, le han seguido Karim Benzema, N'golo Kanté y más recientemente Neymar.
Este es el caso del equipo Al-Hilal que llevaba gastados 353,1 millones con fichajes como el de Neymar (90 millones) o Malcom (60 millones). Le sigue de cerca Al-Ahli con un desembolso de 194 millones para tener entre sus filas a jugadores como Gabri Veiga (40 millones) o Riyad Mahrez (35 millones). Cerrando el ranking está el equipo donde juega Ronaldo, Al-Nassar se ha gastado 165,1 millones en reforzar su plantilla. De momento, ha fichado a Otávio (60 millones) y a Sadio Mané (30 millones) entre otros.
El objetivo de los saudíes es lograr una competición de fútbol que pueda estar al mismo nivel que las europeas e incluso que sea una de las principales del mundo, pero también tiene el foco en la candidatura al Mundial 2030. Los clubes españoles en cualquier caso no muestran preocupación.
"El deporte es global. LaLiga ya es una competición muy fuerte y vemos complicado que la liga de Arabia logre lo que nosotros tenemos en el corto plazo. No todo se consigue a golpe de talonario", comentan desde el Atlético de Madrid a este periódico. Y en la misma línea se pronunció el director de negocio del Real Betis, Juan Useros: "No todo es el dinero, no son las 'estrellas', debe haber una afición detrás que a Arabia no ha llegado y tardará en llegar". El vicepresidente del Sevilla FC, José María del Nido Carrasco, asegura además que "aunque se llevan talento, también es dinero que entra en Europa". Según dice, "es la rueda del fútbol y son beneficios para los clubes. El caso es ver si son capaces de mantener esta burbuja de compra".
El PSG impulsa a la liga francesa
El PSG, un club en manos de Qatar, ha impulsado el crecimiento en los últimos años de la Ligue 1, la liga francesa, que ha invertido un 54% más y se ha gastado un total de 898,6 millones de euros, casi al mismo nivel que la competición de Arabia Saudí. El PSG se ha gastado un total de 349,5 millones de euros, a mucha distancia del Mónaco, que ha invertido 83 millones o el Olympique de Marsella, que ha destinado 72 millones de euros. Entre otros jugadores, el club parisino ha fichado a Kolo Muani, procedente de Eintracht, por 95 millones de euros; a Manuel Ugarte, del Sporting de Lisboa, por 60 millones; a Ousmane Dembélé por 50 millones y a Lucas Hernández o Bradley Barcola, entre otros, por 45 millones de euros cada uno. La liga francesa se convierte así en un monólogo.