
El aumento de la demanda de vivienda en alquiler ha puesto en evidencia la necesidad del mercado español de aumentar la oferta. Según los cálculos de la consultora Savills Aguirre Newman, se necesitan 1,2 millones de viviendas adicionales de aquí a 2030. En la actualidad hay 4,2 millones de viviendas en este régimen, el 95% en manos de particulares.
Esta es la principal conclusión del evento organizado junto con Garrigues, El futuro del build to rent, perspectivas del mercado y aspectos tributarios, donde los expertos fiscales han abogado por la necesidad de conservar una regulación fiscal estable y atractiva para los inversores.
Susana Rodríguez, CCO de Savills Aguirre Newman, ha hecho hincapié en la necesidad de diseñar el mercado del alquiler y ha explicado que en muchos casos el producto que se oferta en el mercado está "obsoleto y no se adapta a las necesidades de la demanda, con una media de antigüedad de 20 años".
Jaime Pascual-Sanchiz, CEO de Savills Aguirre Newman, ha destacado que en materia de build to rent España se enfrenta al desafío social, económico y de profesionalización del sector para poder seguir la estela de los mercados en Europa.
"Tras la época de confinamiento las ciudades siguen atrayendo talento y hay que aprovechar la oportunidad para crear una industria donde la parte institucional tradicionalmente no ha estado presente", ha dicho durante el encuentro.
En el ámbito de la fiscalidad, José Ignacio Guerra, socio del departamento de Derecho Tributario de Garrigues, ha incidido en que los cambios fiscales "a mitad de partido no pueden ser buenos", haciendo referencia al hecho de que los proyectos de BTR pendientes de entregar y los que acaban de entregarse se van a encontrar con cambios en la fiscalidad que afectarán a la inversión ya realizada. Además, ha aprovechado para reclamar "un marco legal y fiscal más estable".
La inversión
La inversión en multifamily alcanzó los 2.300 millones de euros en 2021, lo que supone un 21 % de la inversión inmobiliaria total. Una cifra que para Susana Rodríguez responde a factores demográficos, socioeconómicos, al desequilibrio entre oferta y demanda en alquiler en el mercado inmobiliario de las ciudades y a la cantidad de liquidez que disponen los mercados financieros.
Del total de la inversión, Madrid capturó el 52% y Barcelona el 13%. La rentabilidad en este tipo de activo es muy ajustada, con yields del 3 % en prime en las grandes urbes y hasta el 5 % en las secundarias, y con una financiación en torno al 50 % y 60 % para nuevos proyectos.
En cuanto a las rentas, los alquileres se han incrementado un 14 % en las ciudades principales y un 35 % en las secundarias.