
La Comunidad de Madrid está trabajando para poder sacar a finales de septiembre o principios de octubre la licitación de otras 3.000 viviendas destinadas al alquiler asequible que se engloban dentro del Plan Vive, que tiene el objetivo de construir 15.000 viviendas en la legislatura mediante colaboración público-privada en suelos de la administración.
En estas 3.000 nuevas unidades se incluyen las aproximadamente 1.500 viviendas que formaban parte del Lote 4, el único de la primera licitación que quedo desierto.
Para que esta vez no suceda lo mismo el gobierno regional va a apostar por fraccionar este lote en carteras más pequeñas y combinar estos suelos con otros más atractivos. Así lo ha explicado a elEconomista, José María García Gómez, Viceconsejero de Vivienda y Ordenación del Territorio de la Comunidad de Madrid, que asegura que van a reorientar el Lote 4 con el objetivo de agilizar un plan que "nos va a permitir ofrecer a las ciudadanos vivienda a precios asequibles mediante un bien, como es el suelo público, que es de todos".
La licitación de estas 3.000 nuevas viviendas llegará una vez se hayan adjudicado, previsiblemente a finales de septiembre, los Lotes 1, 2 y 3, por los que han presentado ofertas Aedas Homes, en alianza con el fondo Ares, y la promotora Culmia.
¿Qué pasó con el Lote 4?
En el lote que quedó desierto en la primera licitación los suelos ubicados en el municipio de Navalcarnero tenían un peso fundamental. A estos se sumaban tres parcelas en Colmenar Viejo, una en Pinto, una en Velilla de San Antonio y una en Humanes. "La duda es si ese peso excesivo de Navalcarnero haya podido arrastrar la rentabilidad de este lote", apunta García, que destaca que al hecho de que no hubiera ninguna parcela de clase A se suma el gran tamaño de este lote, lo que hace que se requiera mucha inversión.
Ahora el gobierno regional está analizando posibles opciones que pasan por "fragmentar este lote en licitaciones más pequeñas y además combinar estos suelos con otros que tenemos pendientes para las próximas fases y que son parcelas en las que estamos resolviendo cuestiones urbanísticas. Con esto vamos a ver si la rentabilidad esperada es más alta y por tanto logramos que acudan licitadores", explica.
¿Dónde están las nuevas parcelas?
García concreta que los suelos más inmediatos que tienen en cartera para lanzar la nueva licitación son, por un lado, una "parcela muy atractiva de unas 515 viviendas en Boadilla del Monte que está pendiente de finalización de un plan especial y creemos que para septiembre, a más tardar octubre, el instrumento urbanístico quedaría aprobado".
Asimismo, están pendientes de otra parcela bastante grande de unas 400 viviendas en Aranjuez, "que tienen una pequeña cuestión pendiente del proyecto de urbanización" y por otro lado, cuentan con varias parcelas en Móstoles que superan las 500 viviendas y que están a falta de unas cuestiones simplemente registrales de adscripción a la Dirección General de Vivienda.
Las nuevas licitaciones irán a lotes más pequeños que supongan una inversión de entre 30 y 40 millones
Además de la nueva combinación de parcelas, García explica que en las próximas licitaciones "no iremos a lotes tan grandes". Así, la nueva apuesta pasa por diseñar carteras de unas 300 a 500 unidades, "tenemos que ver el tamaño adecuado para generar sinergias constructivas, pero iremos a lotes más pequeños que requieran un esfuerzo inversor de unos 30-40 millones de euros en lugar de los 160-170 millones de los primeros lotes", apunta García.
Además, según explica el Viceconsejero de vivienda estos cambios permitirán que "haya más concurrencia y que puedan participar en el Plan Vive a otro tipo de compañías de un tamaño medio dando entrada a otros operadores de mercado".
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