La fecha del próximo debate de investidura se conocerá este martes sí o sí. Aunque se ha anulado la cita presencial entre el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, y la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, para fijar fecha para la investidura, la reunión se celebrará de forma telefónica ante los retrasos en el reparto de altos cargos en la Unión Europea.
Así lo indican fuentes del PSOE, que precisan que "el contacto se producirá, "como vienen siendo habitual en otras investiduras, por teléfono. La fecha de la investidura, como estaba previsto, se conocerá mañana". Se espera que a las 12 del mediodía, en comparecencia ante la prensa, Batet anuncie la fecha definitiva del pleno.
La incertidumbre sobre la fecha de la investidura, que según fuentes socialistas será en la segunda mitad de julio, se mantiene en unas circunstancias en la que cada aspecto que rodea el futuro intento de elección de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno, que se pretende en julio, es incierto.
Sánchez continúa sin los apoyos necesarios para superar el examen parlamentario. Es más, Unidas Podemos, su socio preferente, ha asegurado este lunes que ni siquiera les han ofrecido desde el PSOE cargos intermedios de Gobierno, en el eterno debate de los sillones que mantiene distanciadas a ambas formaciones.
Sánchez pide disculpas
Sánchez ha pedido perdón desde Bruselas a Batet y a los grupos parlamentarios por no poder acudir físicamente mañana a la cámara a comunicar la fecha del debate de su investidura. El presidente, que ha confirmado que dirigirá una carta a Batet en señal de "profundo respeto" a ella y a los grupos, ha dicho que cree que su "deber" es participar en el Consejo Europeo Extraordinario que se ha suspendido este lunes hasta mañana a las 11:00 horas en Bruselas para acordar el reparto de los principales cargos comunitarios.
"Yo creo que España tiene que estar representada en el Consejo; tenemos que defender los intereses de nuestro país, también de la socialdemocracia europea y, por tanto, he preguntado a las Cortes Generales y al Gobierno de España cuál es el uso, el hábito parlamentario, porque yo quiero respetar al máximo las costumbres parlamentarias y al parlamento de España", ha explicado a su salida de la fallida cumbre europea, recoge EFE.
Tras apuntar que, en virtud de esa consulta, ha constatado que la costumbre habitual no es que vaya el candidato a la investidura al Congreso, sino que con una carta o una llamada telefónica se ha hecho regularmente, ha insistido en que las "causas sobrevenidas" de su presencia en Bruselas mañana justifican que lo que vaya a comunicar la fecha de esa forma.