
La investidura de Pedro Sánchez para intentar perpetuar su estancia en Moncloa se prevé fallida en el primer intento que tendrá lugar en el mes de julio. Esta circunstancia acerca la repetición de otras elecciones generales en otoño. Y es precisamente este escenario lo que suscita una guerra dentro del Partido Socialista, que divide a los que prefieren pactos -entre los cuales también hay divisiones-, de los que piensan que volver a las urnas puede acabar laminando a Unidas Podemos, y por tanto dar buenos réditos electorales a Pedro Sánchez.
El secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, está buscando sin descanso que la investidura salga adelante, si no es ahora, en una segunda intentona posiblemente en septiembre. Alega que el resultado electoral es claro sobre quién quieren los ciudadanos que gobierne, pero no acepta que los votos de Sánchez vengan de cualquier bando.
Más allá de la llamada a la cordura a Unidos Podemos, que ya apuntan al fracaso en julio, el ministro de Transporte en funciones, y número dos del PSOE, sigue invitando a PP y Ciudadanos a que faciliten la investidura haciendo de su discurso un llamamiento a la responsabilidad para no abocar al país a unas nuevas elecciones generales y evitar también que el apoyo venga de independentistas o nacionalistas. Eso sí, a cambio, y de momento, no ofrecen nada en contrapartida.
En la misma línea pactista y de evitar otros comicios se mueve la diputada socialista, Adriana Lastra. Sin embargo, la portavoz del grupo en el Congreso presenta matices en su discurso, sobre la oratoria de Ábalos: y es que, si la investidura sale adelante con ayuda de ERC, bienvenida sea.
Fuera de los pactos, la otra sección del PSOE la capitanea Iván Redondo, el 'creador' de un Pedro Sánchez revitalizado que volvió a primera plana del partido -después de dado por muerto- y que logró instalarse en La Moncloa gracias a una moción de censura contra Mariano Rajoy. Para el gurú del líder socialista, una repetición electoral es el escenario más favorable para el PSOE. Una coyuntura como esta puede aniquilar el peso político de Podemos y convertir revertir dicha operación en más escaños para los socialistas. Esto, reforzaría a su entender el resultado del 28-A.
El riesgo de intentar ganar más escaños
Pero un escenario de elecciones no convence ni a Ábalos ni a Lastra. La ley d'Hondt tiene caprichosas derivas, y si bien el PSOE puede crecer a costa de Pablo Iglesias, el PP también puede experimentar mejores resultados, merced al desgate de Vox y a la complicada situación que vive en estos momentos Ciudadanos.
El afianzamiento del bipartidismo no tiene por qué arrojar unos resultados lo suficientemente favorables como para no tener que volver a depender de otras fuerzas, incluso aunque Iñigo Errejón decida presentarse a unas generales, con el fin de hacerle un roto a Unidas Podemos, y ayudar así a Pedro Sánchez.