
La patronal Foment del Treball lideró ayer el mensaje de rechazo al parón productivo que piden algunos presidentes autonómicos y que rechazan los expertos consultados por elEconomista.
La organización que encabeza Josep Sánchez-Llibre se convirtió este lunes en la portavoz del mensaje de empresarios y economistas sobre la medida que, además de "desproporcionada y contraproducente", no haría sino complicar la recuperación económica una vez superada la crisis sanitaria y económica ocasionada en nuestro país por la epidemia de coronavirus Covid-19.
Así, en un valiente comunicado la patronal catalana se enfrentó a la voluntad de la Generalitat –que pide un confinamiento total excepto servicios esenciales– y a lo manifestado por el líder del PP, Pablo Casado, quien está a favor de pecar más "por exceso" que por defecto, siempre en pro de la salud. Ahora bien, el dirigente popular mantiene que una medida de este calado, que en todo caso ha de tomar el Gobierno, no tendría que aplicarse de igual modo en todas las comunidades, y a habría que valorar la situación particular de cada una de ellas, distinguiendo un Madrid con unas infraestructuras esenciales, de Murcia con su peculiaridad como zona costera.
"Muchas familias quedarán expuestas a problemas de subsistencia"
Entrentanto, la medida pretendida de Foment del Treball -reza el escrito- "no respeta el principio de proporcionalidad y, además, no tiene en cuenta que sin el mantenimiento y posterior recuperación del nivel de la actividad económica muchas familias quedarán expuestas a problemas de subsistencia".
En el mismo sentido se pronunciaron los expertos consultados: "Un parón total aniquilaría la única posibilidad de que se produzca una recuperación rápida de la economía", adujo el economista Javier Santacruz. En el mismo sentido el profesor de Finanzas del CEF Juan Fernando Robles manifiesta que "rompería la cadena de suministro y provocaría desabastecimiento". Por su parte, Raymond Torres, desde Funcas, llama la atención sobre la necesidad de "evitar la quiebra definitiva de negocios y empresas".
Calviño explicó que las medidas adoptadas son el compendio de las propuestas por las administraciones regionales
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quiso zanjar la polémica suscitada por algunas autonomías como Murcia o Castilla y León. La vicepresidenta económica, Nadia Calviño, explicó que las medidas ya adoptadas son el compendio de medidas propuestas por las administraciones regionales, y "las más fuertes de nuestro entorno". Preguntada por elEconomista, indicó que "toda la actividad económica se está orientando a los ámbitos prioritarios, como el agroalimentario, el suministro de gas, electricidad, agua y telecomunicaciones, el teletrabajo en los sectores que sea posible y, en la protección de los trabajadores". Así que, redundó la vicepresidenta, "en la práctica estamos ante una contención muy estricta que pone como prioridad la seguridad".
Los criterios de las comunidades son de lo más dispares. Mientras Murcia pide a Sanidad el cierre total de las actividades, salvo las esenciales, remarcando un fenómeno particular de las zonas costeras, en el País Vasco manifiestan que quieren que no se cierren las empresas. Aboga Euskadi por un mantenimiento mínimo y en condiciones de seguridad de la actividad industrial. Y además señala que un parón completo sería muy grave para la economía vasca y luego mucho más difícil de poner en marcha cuando todo pase.
La Generalitat de Cataluña, por su parte, insiste en el confinamiento total excepto servicios esenciales y decreta q todos los trabajadores deban trabajar con 1,5 metros de separación y estudia reducir los horarios comerciales.
El presidente de la Comunidad de Valencia, Ximo Puig, subrayando que sea el Gobierno de España quien ha de tomar las decisiones, planteó este domingo en la conferencia con los presidentes autonómicos con Sánchez "que se estudie la conveniencia de acelerar la efectividad del confinamiento" y limitar algunas actividades económicas no esenciales". Por su parte, Extremadura pide lealtad con el mando único.
Agentes sociales
Los agentes sociales, pese a estar de acuerdo en la prioridades de la salud de los trabajadores y detener la infección, varían en la estrategia. Calviño mantuvo un encuentro online con sus líderes y el mensaje que recibió fue algo diferente. CEOE muestra su total alineación con las decisiones del Gobierno desde la lealtad institucional y, siguiendo las tesis de Moncloa, garantizar los servicios esenciales y, aunque la actividad ya está muy ralentizada, mantener la mínima posible, pues así será más fácil remontar la actividad.
En Cepyme entienden que lo primero es la salud pública, pero defienden continuar con la actividad si las medidas sanitarias y de seguridad lo permiten, lo que facilitará que la reactivación de la economía tras la crisis sea más fácil y rápida. La patronal del metal, Confemetal, una de las más afectadas si se produce el parón, solicita la "colaboración responsable de todos para tratar de mantener en el máximo nivel posible la actividad económica, respetando las medidas marcadas por las autoridades sanitarias".