Tras varias semanas encadenando ascensos, Wall Street se encuentra en una de las zonas de recuperación más críticas a la que se podía enfrentar. Las bolsas de EEUU se encuentran pegadas al rango de recuperación del 61,8/66% de la última caída, un nivel que tradicionalmente actúa como una frontera técnica que separa un simple rebote dentro de una tendencia bajista de una recuperación sólida y estructural.
"Solo si se supera con solvencia podremos pensar que estaríamos ante una señal técnica positiva de gran calado", explica Joan Cabrero, analista técnico y estratega de Ecotrader en el último episodio del podcast Estrategia de Mercado
Este umbral técnico se encuentra en niveles de 20.300 en el Nasdaq 100, 18.300 en el Nasdaq Composite, 5.700 en el S&P 500, y 41.850/42.220 en el Dow Jones Industrial. Resistencias claras y bien definidas, cuya superación o rechazo ofrecerán pistas muy valiosas para la hoja de ruta de las próximas semanas.
Y es que, si desde estos niveles vemos un giro bajista, "seguiré manejando la hipótesis de que todavía puede haber un nuevo susto de mercado, que llevaría a los índices a marcar nuevos mínimos del año, con el S&P 500 buscando la zona de los 4.500 puntos, que supondría replicar con precisión quirúrgica la estructura bajista del año 2022", señala Cabrero.
La buena noticia es que Europa va por delante. Mientras Wall Street duda, el EuroStoxx 50 ya ha conseguido batir la resistencia del 61,8% y los 2/3 de recuperación de su última caída, lo que refuerza la tesis de que los mínimos del pasado 7 de abril fueron un suelo fiable.
Pese al optimismo, este contexto no es propicio para la toma de posiciones en el mercado de renta variable. El inversor que quiera comprar debe esperar a que los precios le ofrezcan una mejor oportunidad. "De forma generalizada, el escenario más interesante para plantear nuevas compras lo situaría en estos momentos cuando hubiera una mejora sustancial de la ecuación rentabilidad-riesgo, sobre todo si tenemos en cuenta que, en este momento, el soporte clave (stop) que no debe perderse para mantener un contexto alcista se encuentra en los mínimos del 7 de abril en los índices que ya han superado el 61,8% de retroceso de Fibonacci de toda la caída desde los altos del año", aclara Cabrero.
En el caso del selectivo español, "el escenario más interesante para plantear nuevas compras lo situaría en estos momentos en la zona de los 12.350 puntos, pero este nivel debería elevarse si el Ibex logra marcar nuevos altos", destaca Cabrero, que recuerda la cercanía actual del Ibex 35 a su zona de máximos y cómo hasta los mínimos de abril aún tiene un 14% de distancia.
En Europa es similar la situación, con el EuroStoxx 50 a un 14% de los mínimos de abril, aunque eso sí, con algo más de recorrido hasta los máximos del año, un 5%.
Cómo operar en Wall Street
El hecho de que la bolsa de EEUU en todas sus referencias esté testeando resistencias invita a mantener la calma y observar con atención antes de tomar decisiones. "Si los índices logran romper al alza esta barrera, sería partidario de esperar una corrección proporcional del último rebote -entre el 50 y el 61,8%- para comprar con mayor confianza. Es decir, esperar el pullback clásico tras la ruptura de una resistencia clave", señala Cabrero.
"En cambio, matiz el experto, "si desde estos niveles vemos un giro bajista, seguiré manejando la hipótesis de que todavía puede haber un nuevo susto de mercado, que llevaría a los índices a marcar nuevos mínimos del año, con el S&P 500 buscando la zona de los 4.500 puntos, que supondría replicar con precisión quirúrgica la estructura bajista del año 2022. Y es que, ese nivel es el que está marcado en rojo como posible zona de ganga, una oportunidad táctica para cargar cartera si el mercado decide darnos otra vuelta de tuerca a la baja.
