
Coincidió que en el momento de encender la televisión comenzó a hablar a los congresistas del PP Alberto Núñez Feijóo y, aunque mi afición a los discursos políticos está ya de capa caída, me gustó que Feijóo echara mano de palabras y conceptos pedagógicos que en los tiempos que corren no se usan. Me temo que la pedagogía política y la escolar parecen pasadas de moda. Me llamó especialmente la atención que echara mano del sistema socrático, interrogándose de esta manera: ¿Qué país es este con el infierno fiscal que ha generado una subida de impuestos nunca antes vista? ¿Qué progreso puede haber endeudando a cada hogar en más de 20.000 euros en los últimos años? ¿Quién restablece servicios públicos dignos del siglo XXI? ¿Quién les permite a varias generaciones pensar en disponer de una vivienda, en tener hijos, en no tener que irse de España para trabajar en lo que estudiaron? Y a continuación presentó sus 10 tareas prioritarias durante los primeros cien días de Gobierno:
1. No entraré en La Moncloa sin llevar debajo del brazo las propuestas normativas para poder desarrollar desde el primer día un plan de regeneración democrática en nuestro país. Es lo más urgente. 2. Faltan viviendas y se harán. El Plan de Vivienda se aprobará también en el primer Consejo de Ministros y se empezará a aplicar inmediatamente. Ya está bien de vender casas que son solo humo. Y ya está bien de que quienes más fácil acceso tienen a una vivienda sean los okupas. 3. Tampoco admite excusas ni demoras aliviar la presión fiscal que sufren las familias y las empresas. 4. Tiene que merecer la pena trabajar y para eso el subsidio no puede competir con el empleo. El subsidio tiene que ser red para levantarse, no ancla para quedarse quieto. El esfuerzo tiene que contar. 5. Hacen falta médicos en España y nadie puede erigirse en adalid de los servicios públicos sin afrontar la principal carencia del Estado de Bienestar. 6. También hace falta una política de agua. Porque hace demasiado tiempo que no se hace nada para que la haya. España tendrá un Plan Nacional del Agua. 7. Reducir la inmigración ilegal. Parece razonable. ¿Cómo no vamos a reducir lo ilegal? ¿Cómo lo ilegal va a tener garantías? ¿Cómo lo ilegal va a tener derechos? 8. Hay que reforzar la seguridad. Porque no hay convivencia sin seguridad. 9. Clarificar la política de Defensa. 10. Ley de lenguas para garantizar la enseñanza en nuestro idioma común en toda España, respetando por supuesto las lenguas cooficiales. Para conseguir ese equilibrio y esa cordialidad. Hay que garantizar que todos los niños españoles puedan ser educados en español.
Me gustó el discurso, me gustó quien lo dio y no se me ocurrió pensar que había escuchado a un político de derecha extrema, sino a un señor responsable a quien pienso votar en las próximas elecciones. Que ojalá se celebren cuanto antes. Yo sigo siendo socialdemócrata y soy español, por esto último no puedo votar a Sánchez ni a los de su cuerda. Pero tampoco puedo hacerlo por haber metido en el Gobierno a una cuadrilla que no sabe ni legislar ni administrar.