Opinión

El teletrabajo según el Deutsche Bank

  • No hay razón para gravar más a quienes trabajan a distancia
  • Hay otras vías para remunerar como se debe a los trabajadores esenciales
Los retos que plantea el teletrabajo requieren otras soluciones.

El pasado 11 de noviembre en un portal económico apareció una noticia con un llamativo título: "¿Pagar más impuestos por teletrabajar? Así es la reforma que propone Deutsche Bank", firmado por Luke Templeman. La idea es destinar el 5% del salario de los teletrabajadores a los empleados esenciales (que trabajan en las dependencias de las empresas).

En su opinión, este nuevo impuesto "tiene sentido" para ayudar a los trabajadores esenciales "desde un punto de vista personal y económico" y "también tiene sentido reconocer a los trabajadores esenciales que asumen el riesgo del coronavirus por salarios bajos".

Según estima el estudio, el impuesto generaría unos ingresos extra para el Gobierno estadounidense de 48.000 millones de dólares. Con esa cantidad se podría pagar una ayuda de 1.500 dólares a los 29 millones de empleados estadounidenses que deben trabajar de forma presencial y cobran menos de 30.000 dólares al año.

Pero las cifras no cuadran, pues si multiplicamos 1.500 por 29 millones el resultado es de 43.500 millones de dólares, por lo que así, de entrada, han desaparecido nada menos que 4.500 millones de dólares de lo supuestamente recaudado.

El Sr. Templeman agrega que quienes trabajan desde su hogar se ahorran gastos de desplazamiento y comida. Lo que no cita son los costes extraordinarios en términos de electricidad, internet, teléfono, calefacción ni de material de oficina para quienes trabajan desde casa.

La propuesta tampoco contempla una mayor carga fiscal para las empresas que tienen menos gastos por el trabajo remoto o que se benefician de la menor movilidad de las personas.

También resulta muy chocante que dicho señor no se haya planteado por qué un trabajador que él define como esencial (y que muy probablemente lo sea) cobre menos que otro que no lo es.

Pérdidas para el conjunto

Sorprende más todavía que pretenda arreglar la cuestión quitándoselo a unos trabajadores para dárselo a otros sin que exista ganancia alguna y sí pérdidas notables para el conjunto. ¿No sería mejor pagarle más al que adquiere una mayor responsabilidad y no plantear el quitárselo a otros que trabajan según los términos convenidos con igual o mayor eficiencia para la empresa?

Quizá el Sr. Templeman sea un directivo brillante y con una inteligencia privilegiada para este tipo de estudios, lo cual le permite decidir respecto a los demás sin que, posiblemente, a él le afecte lo más mínimo. Suele pasar. En todo caso lo que se desprende de la noticia es que ha considerado lo que le parece o lo que le viene bien para sus propósitos, ignorando lo que no le interesa, pues no toma en consideración que los menores gastos por desplazamiento suponen también un ahorro de energía, aparte de una mejora del medioambiente.

Tampoco tiene en cuenta el ahorro considerable para la propia empresa derivado no solo de los menores consumos por suministros (electricidad, calefacción, teléfono, etc.,) sino, a medio plazo, de las menores inversiones en edificios e incluso la materialización de parte de los existentes como ingresos extraordinarios.

Estos menores costes y mayores ingresos se podrían destinar parcialmente a pagar mejor a sus trabajadores esenciales, idea mucho más positiva y eficaz que la planteada y con la que, además, todos saldrían ganando.

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Hay una idea general sobre que las empresas deben pagar. Está muy extendida. Por el hecho de crear una empresa, una persona ya no es empresario, sino pagano. Es tan fácil. Es lo único que interesa al estado. Realmente, toda la contabilidad que obligatoriamente debe llevar una PYME, que es mucha, sirve fundamentalmente para justificar gastos e ingresos y pagar puntualmente los impuestos. Para nada más. A una PYME le es indiferente o prácticamente anecdótica. Sí, es cierto que de ello viven multitud de gestorías y asesores. Por ejemplo, Sr. Leguina, cada año que un trabajador fijo está en una empresa genera automáticamente un aumento de los gastos de indemnización en caso de despido, ya que crece con los años, de modo que estará usted de acuerdo en que se debería generar una partida que contemple este posible pago para diluirlo a lo largo del tiempo de vida de la PYME, y tenerlo preparado por si acaso se ve abocada al cierre o al despido. Pero, fíjese usted, Sr. Leguina, no existe. No se contempla en nuestras normas de contabilidad, ya que genera menos beneficio y por tanto menos impuestos. Así pues, le brindo este material inédito para su próximo artículo, que dicho sea de paso, siempre leo con mucho interés.

Puntuación 5
#1