
Uno de los momentos más complicados al volante es buscar sitio para aparcar. En algunas localidades, encontrar un sitio libre cerca de casa es prácticamente misión imposible, por lo que aquellos conductores que tienen una plaza de parking privada son unos afortunados. Eso sí, aunque normalmente es más seguro aparcar en casa o en un garaje, es importante estacionar con cuidado para evitar sustos.
Y es que ya sea por costumbre, por ir con prisas o por tener un exceso de confianza, hay muchos conductores que cuando tienen que aparcar en sus garajes lo hacen a la ligera. Y aunque normalmente no tiene por qué suceder nada, siempre es mejor tener un extra de precaución para evitar cualquier susto y, al mismo tiempo, mantener el coche en buen estado.
Fallos comunes al aparcar
A priori aparcar en un garaje privado es más fácil que hacerlo en la calle, ya que suele ser un sitio conocido, con suficiente espacio para maniobrar y sin otros vehículos alrededor. Sin embargo, hay algunas consideraciones a tener en cuenta para realizar un estacionamiento correcto. El Espectador ha recogido unas declaraciones de Pablo Sáenz, piloto experto de Michelin, en las que explica cuáles son los errores más comunes al aparcar en un garaje.
Muchos de esos fallos derivan del hábito o exceso de confianza. En este sentido, el primero de esos errores es realizar la maniobra demasiado rápido, sin calcular los espacios o comprobar que el estacionamiento es seguro. Del mismo modo, depender excesivamente de herramientas tecnológicas como las cámaras o los sensores es perjudicial, ya que provoca que el conductor reaccione más lento ante cualquier imprevisto.
Sáenz también recuerda la importancia de no estacionar demasiado cerca de paredes, ya que dificulta la apertura de la puerta, y de utilizar el freno de mano para evitar que el vehículo se desplace si hay algo de pendiente. Además, aporta otros consejos más generales como comprobar la altura del techo antes de entrar al garaje, aparcar en el espacio asignado y revisar que no hay personas u objetos en puntos ciegos.
A tener en cuenta
El experto remarca la importancia de entrar lento al garaje y evitar movimientos bruscos. Según comenta, otra de las claves es "conocer bien las dimensiones del vehículo y utilizar correctamente los espejos". Siempre que sea posible, hay que entrar en línea recta para evitar golpes con columnas, paredes u otros vehículos. Por último, destaca la importancia de dedicar el tiempo que haga falta a corregir cualquier fallo y de esta forma garantizar un aparcamiento seguro.
Más allá de los consejos de Sáenz, todo conductor debe tener en cuenta cuáles son las características de su garaje. Si no hay suficiente ventilación, se pueden acumular gases contaminantes que afectan tanto al conductor como al vehículo. Igualmente, la humedad favorece la corrosión de la carrocería.